Recibida con elogios entusiastas por la crítica del Reino Unido y Estados Unidos, que la ha considerado de forma unánime uno de los mejores libros del años, La impostura supone el regreso a la novela de Zadie Smith, siete años después de Tiempos de swing y un cuarto de siglo después de su irrupción en el panorama literario con Dientes blancos. Llena de vida, ideas, humor, sentimientos y algo semejante a una verdad moral, La impostura narra con extraordinaria habilidad las controversias sociales del Londres victoriano a través de un puñado de personajes memorables.
Icons of history—from Epictetus and Demosthenes to Amelia Earhart and Richard Wright—followed a simple formula to achieve greatness. They were not exceptionally brilliant, lucky, or gifted. Their success in overcoming extreme obstacles was the result of a timeless set of philosophical principles that the greatest men and women have always pursued.
Yo solía trabajar limpiando las casas de otras personas, ahora apenas logro creerme que este sea mi hogar. La encantadora cocina, la calle tranquila, el enorme jardín en el que los niños pueden jugar. Mi marido y yo hemos ahorrado durante años para que nuestros hijos tengan la vida que se merecen. Aunque siento algo de recelo hacia nuestra vecina, la señora Lowell, veo su invitación a cenar como una oportunidad para hacer amigos. Cuando su empleada abre la puerta con un delantal blanco y el pelo recogido en un moño tirante, sé exactamente cómo se siente. Pero su gélida mirada me produce escalofríos... La empleada de los Lowell no es lo único extraño de nuestra calle. Estoy convencida de que alguien nos observa. Y cuando conozco a la mujer que vive enfrente, sus palabras me dejan petrificada: "Ten cuidado con tus vecinos". ¿Cometí un terrible error mudándome aquí con mi familia? Pensaba que había dejado atrás mis secretos oscuros. Pero ¿podría ser este apacible barrio residencial el sitio más peligroso de todos?
Una amenaza sobrevuela París. Una figura sombría, espectral, capaz de cometer las peores villanías que se puedan imaginar. Un hombre sin identidad, con la pericia de convertirse en cualquiera; un maestro del disfraz, del robo, del secuestro, del chantaje, de la suplantación de identidades y del asesinato. Fantomas es, probablemente, el primer «supervillano» de la historia tal y como conocemos actualmente la denominación, el que siguió la estela de Arséne Lupin (creado por Maurice Leblanc seis años antes) pero llevándolo más lejos. Porque, aun siguiendo la estela de Arséne Lupin, desde el momento de su publicación, en febrero de 1911, Fantomas (y las treinta y una novelas en torno al personaje que rápidamente aparecieron) se convirtió en un fenómeno de masas, cuya popularidad trascendió todos los estratos sociales y culturales.
¿Pueden tres citas derribar las murallas de un corazón?
Clare lo tiene todo menos un corazón. Se lo rompieron de adolescente y, desde entonces, se ha dedicado a evadir las relaciones y así evitar que vuelvan a jugar con ella. Tiene líos de una noche y su lema es: No repetir.
Lucas es su opuesto: un romántico empedernido que salta de una relación formal a otra.
Son amigos, y se atraen. Deciden tener sexo. Pero Lucas le pide tres citas antes de acostarse esa única vez, como pretende Clare. Tres citas en las que él intentará derribar las murallas alrededor de su corazón.
Theo y Kit han compartido muchas cosas: una gran amistad, ligues secretos, una relación de pareja y, ahora, rumbos distintos. Tras romper en pleno vuelo de camino al viaje por Europa con el que siempre soñaron, sus vidas se separaron definitivamente.
Lo único que aún les une es el vale para el tour europeo que no hicieron hace cuatro años. Con el viaje a punto de caducar, a Theo y Kit les parece una idea genial hacer el viaje ahora. En solitario. Por su cuenta.
Sin embargo, cuando suben al autobús de la agencia en Londres descubren que han pensado lo mismo, y ahora les esperan tres semanas de convivencia sin escapatoria posible. Eso sí, con paisajes impresionantes y sabores exquisitos en las ciudades más románticas de Francia, España e Italia. Pero no pasa nada, porque definitivamente han superado lo que ocurrió.