Los relatos aquí reunidos son lo que podríamos llamar «cuentos escogidos», y si algo tienen en común es que no son de este planeta. Literalmente. Pues están ambientados en desopilantemente absurdos rincones de la galaxia. Con un humor y una imaginación que no se detienen ante nada ni nadie, Laura Fernández reinventa nuestro mundo desde otros infinitos mundos poblados por famosos detectives mutantes, periodistas fantasma, dinosaurios oficinistas, autodirigibles que hablan más de la cuenta, limoneros que no son exactamente lo que parecen y habitantes de otros planetas que podrían habitar perfectamente éste.
1945: la guerra ha terminado y algunos alemanes deben huir del país. Tras un viaje agotador, un hombre llega a un antiguo monasterio franciscano que se alza frente a los Dolomitas. Allí hallará refugio y también sellará un pacto.
Más de una década después, el doctor Quirke es «un animal herido» que se ha mudado a casa de su hija Phoebe tras la trágica muerte de su mujer. Cuando en un garaje de Dublín aparece el cadáver de la joven estudiante judía Rosa Jacobs, todo parece apuntar a un suicidio, pero Quirke y el inspector Strafford (que se enfrentan a su primer caso juntos) sospechan que se trata de un crimen, al igual que la hermana de la víctima, una periodista que se une a la búsqueda de la verdad y zarandea el corazón del patólogo. Mientras las relaciones entre los dos investigadores se vuelven cada vez más tensas, el misterio se agudiza cuando descubren los vínculos de Rosa con el hijo de una acaudalada familia alemana que se mudó al condado de Wicklow tras la Segunda Guerra Mundial y tiene negocios en Israel. ¿Podrán unir las piezas del rompecabezas oculto?
Un asesino en serie, detenido por la comisaria Battaglia hace veintisiete años, consigue escapar del módulo de alta seguridad de la cárcel en la que está preso. Sin embargo, tras diez días de fuga, él mismo se vuelve a entregar a la policía porque teme ser el blanco de otro peligroso criminal que quiere reproducir los antiguos y macabros escenarios de sus asesinatos. Para desvelar nuevos detalles sobre sus crímenes e información sobre su misterioso imitador, solo está dispuesto a hablar con Teresa Battaglia. Teresa debe interpretar las enigmáticas pistas que este deja tras de sí: unas refinadas piezas de mosaicos que construye con trozos de huesos humanos, al tiempo que intenta reconectar con la persona que fue hace casi tres décadas, aquella mujer brillante, atrapada en una turbulenta relación conyugal, que se convirtió en una pionera cazadora de asesinos en serie y en la primera especialista en perfiles criminales de la policía italiana.