En la apacible isla tropical de Antigua, Annie John vive su infancia en un entorno paradisiaco, al amparo de sus padres y educada en un buen colegio. Pero, como en la mayoría de los paraísos, en algún oscuro rincón acecha la serpiente. A medida que Annie deja atrás la niñez, las inevitables transformaciones físicas y emocionales anuncian otra etapa, marcada por la rebeldía, el cuestionamiento de su pequeño universo y, para su disgusto, los cambios en su progenitora, quien de pronto sustituye su amor incondicional por una desconcertante rivalidad femenina.
Al término de la etapa escolar, Annie deja atrás Antigua y a los suyos, pero arrastra consigo el duelo por la madre a la que antaño amó. Con su estilo lúcido y esencial y una voz urgente, desgarradora y universalmente familiar, Jamaica Kincaid desarrolla el tema que está en el corazón de su obra: la ambivalencia de los vínculos maternos y la difícil transición de la niñez a la adolescencia.
¿Hasta dónde estamos dispuestos a llegar
para proteger nuestro tesoro más valioso?
Tras el último ataque de Player 2511, Neil, cada vez más sometido a una fuerte presión, busca el más mínimo indicio que lo conduzca al vengador enmascarado que amenaza a su familia y a Selene, con la que tiene una relación inestable: por una parte, el chico se dacuenta de que el vínculo que lo une a ella es cada vez más fuerte, único e indisoluble; por otra, teme que su doloroso pasado le impida vivir plena y satisfactoriamente.
Cuando una revelación sobrecogedora embiste su mundo, Neil se despreocupa de todo y de todos y huye lejos de Selene y de su familia para encontrarse a sí mismo y recuperar algo de equilibrio. Es entonces cuando Megan -guapa como una supermodelo, con unos ojos verdes que quitan el hipo- se convierte en su único apoyo. La chica comparte con él recuerdos terribles y parece la única capaz de calmar, al menos en parte, su desasosiego. Mientras Neil, indeciso entre la atracción por Megan y el sentimiento indefinible por Selene, trata de aclararse, Player 2511 prepara el asalto final, y no tiene la intención de dejar títere con cabeza con tal de tomarse su terrible venganza.
Una vida de lucha por el trono.
Una batalla de reyes en la que se alzará una reina.
1100 d. C. La turbulenta línea de sucesión de los reinos de León, Castilla y Galicia obliga a doña Urraca de Zamora, hermana y mano derecha del rey Alfonso VI, a asegurar un futuro para su sobrina, la infanta Urraca, a la que el monarca ha apartado del trono en favor de su hijo menor, Sancho Alfónsez.
Sin embargo, la consejera real no está dispuesta a permitirlo y por ello decide encargar a Lisarda, una joven y astuta cortesana con pocos medios, intrigar en la corte con el objetivo de que su protegida sea coronada como reina de pleno derecho en contra de la voluntad del soberano.
El cometido de Lisarda no es fácil, pero con la ayuda del mercenario Petro el Cartaginés, pronto comenzará a urdir una estratagema para que reyes, nobles y demás señores de la corte caigan en sus redes.
El viaje a las Cataratas del Iguazú de Federico Benítez y sus hijos ya está arreglado, pero una llamada altera los planes en el último momento: una deuda de gratitud, vieja e impostergable, lo obliga a cambiar de rumbo y encaminarse, con esos dos disgustados adolescentes a la rastra, hacia la lejana Patagonia. En cuatro días de viaje, este hombre ensimismado y torpe les contará a los jóvenes una historia oculta que es la suya, la suya y la de su desangelada adolescencia, la suya y la del Primer Torneo Interdivisional de Fútbol del Colegio Nacional Normal Superior Arturo Del Manso, jugado en 1983.
Y ese torneo de fútbol, con sus arbitrariedades, con sus trampas, con sus mezquindades, pero también con sus grandezas, con sus luces y con sus sombras, será para este muchacho de quince años un laboratorio de la vida del que saldrá transformado.
Bajo la forma de un relato de viaje, de una novela de iniciación, Eduardo Sacheri nos atrapa en una historia emocionante sobre los vínculos humanos y nos muestra cómo en el inmenso friso del poder puede recortarse de pronto una figura generosa capaz de cambiar el curso de una vida.
Todos somos nuestro futuro fantasma. Lo llevamos adentro como germen de lo que seremos. Ésta es la novela de lo que fueron en su tiempo, y son mientras leemos, seis amigos desorbitados, habitantes de una casa de huéspedes frente a un parque de jacarandas en una Ciudad de México minuciosamente evocada aquí, en los años sesenta del siglo pasado. Los jóvenes de aquella casa viven su presente a la intemperie. No son héroes más que de la brevedad de sus años. Su modesta epopeya consiste en el ejercicio de una salvaje fraternidad. Los envuelven el azar de la urbe naciente, la noche buscada y la antesala del amor eterno, que es el sexo fugaz. Fantasmas en el balcón es una novela sobre la nostalgia del tiempo que se nos va de las manos y nos lleva con él. Es una historia de fantasmas, como debe ser acaso la historia de toda alegría.