Cosas que ya no existen es un hito en la trayectoria de Cristina Fernández Cubas, un libro que la autora concibió como un recuento de escenas, personajes, viajes y momentos de su propia vida que pedían paso para una suerte de memorias, y que, imponiendose como historias, acabaron conformando un magnífico volumen de relatos vividos. Con las armas de la ficción, y el despliegue de una prosa envolvente y arrolladora, sus páginas nos transportan a un viaje transatlántico al Buenos Aires de los años setenta, a estudiar durante unos meses en El Cairo, a cruzar la frontera boliviana o a vivir singulares peripecias en distintos puntos del globo.
«Cincuenta y un años. Tres veces diecisiete. Tres posibles vidas diferentes si hubiera podido elegir. Aunque nunca elegimos ni decidimos nada, nos adaptamos a lo que se nos presenta. Y con el tiempo nos damos cuenta e interpretamos el mapa una vez que entendemos que “usted está aquí”».
Bob Pop vuelve a la narrativa con su diario más personal. El autor firma aquí una defensa feroz de la memoria y del derecho a la posteridad. Un relato tan crudo como lleno de estallidos de esplendor acerca de la vida real, el dolor físico y emocional y de una insaciable curiosidad intelectual. Dice el diario El País que «Roberto Enríquez, el hombre que hay tras Bob Pop, es un ejemplo perfecto de que eso que llamamos identidad está hecho de lo que hemos leído, de las pelis que hemos visto o de las canciones que hemos oído en bucle en la misma medida que de las muescas que nos dejaron los que nos amaron y los que no». Estos diarios llegan para confirmarlo, compuestos de lecturas, reflexiones, películas, trabajo, dinero, sexo y enfermedad. Un emotivo homenaje, también, a todos los creadores que le han inspirado.
Junio de 1960. Un temporal mantiene aisladas en la idílica isla de Utakos, frente a Corfú, a nueve personas alojadas en el pequeño hotel local. Nada hace presagiar lo que está a punto de ocurrir: Edith Mander, una discreta turista inglesa, aparece muerta en el pabellón de la playa. Lo que parece un suicidio revela indicios imperceptibles para cualquiera salvo para Hopalong Basil, un actor en decadencia que en otro tiempo encarnó en la pantalla al más célebre detective de todos los tiempos. Nadie como él, acostumbrado a aplicar en el cine las habilidades deductivas de Sherlock Holmes, puede desentrañar lo que de verdad esconde ese enigma clásico de habitación cerrada. En una isla de la que nadie puede salir y a la que nadie puede llegar, inevitablemente todos se acabarán convirtiendo en sospechosos en una fascinante novela-problema donde la literatura policial se mezcla de modo asombroso con la vida.
«Testimonio de transformación, disección íntima, búsqueda de conocimiento, Inacabada nos abre al amor y al más
absoluto deseo de comprensión». Giuseppe Caputo
«Quizá la experiencia trans sea inseparable de los rituales de los muertos. Velar el cuerpo quebrado, abrazarlo y cuidarlo en su tránsito», piensa una hija que anhela poner fin al silencio que se ha instalado entre ella y su madre a propósito de su tránsito de género. En el discurrir necesita nombrar esas dos palabras —soy mujer— que definen un renacer y a la vez un duelo por quien ha sido durante treinta y siete años. Pero ¿concluye en algún momento la experiencia de transitar?
Repleta de reflexiones de gran calado, Inacabada es una novela que busca en el intersticio de los géneros literarios un lenguaje para habitar las distancias y detener la tristeza de una identidad no dicha, al tiempo que observa con precisión e inteligencia la posibilidad de liberar cargas familiares para volver a la vida.
El autor de Ser Rojo vuelve con cuatro historias que desdibujan los límites entre realidad y ficción, en la línea de la mejor tradición del cuento argentino.
«Javier Argüello es, sin duda, uno de los escritores actuales más interesantes en nuestra lengua».
Ricardo Martínez Llorca, Zenda
Un antiguo alumno asiste obligado a una reunión en su colegio luego de treinta años, un periodista varado en Ucrania termina encontrándose en Londres con un escritor del siglo XIX, un conferenciante descubre las calles de Pekín de la mano de una íntima desconocida o un escritor que roza la locura siguiendo la pista de un paciente de un manicomio son los avatares que presenta Javier Argüello en estos cuatro relatos que desafían, de manera magistral, la consistencia del mundo que habitamos.