Sylvia Plath es una de las poetas más admiradas y leídas del siglo XX. Sus versos, que a lo largo de los años han ido cobrando protagonismo, especialmente después de que se quitara la vida a los treinta años, son un intento de expresar su desesperación y su obsesión por la muerte. Sus poemas pueden considerarse en gran parte autobiográficos y exploran su angustia mental, su problemático matrimonio con el poeta Ted Hughes y los conflictos sin resolver con sus padres, así como la visión que tenía de ella misma. Plath se ha ido perfilando hasta el día de hoy como uno de los grandes iconos del feminismo, y su poesía en especial El coloso y el póstumo Ariel, una valiosa prueba de que fue una de las grandes escritoras del pasado siglo. Cincuenta años después, sus versos todavía contienen toda su intensidad, dolor y belleza.
Espionaje e intriga en estado puro, amores y desamores desgarrados, aventura e historia de un siglo hecho pedazos,Dime quién soy es un apasionante relato protagonizado por unos personajes inolvidables cuyas vidas construyen un magnífico retrato de la historia del siglo XX.
Un periodista recibe la propuesta de investigar la vida de su bisabuela, Amelia Garayoa, una mujer de la que sólo sabe que huyó abandonando a su marido y a su hijo poco antes de que estallara la guerra civil española. Para rescatarla del olvido deberá reconstruir su historia desde los cimientos encajando, una a una, todas las piezas del inmenso y extraordinario puzle de su vida.
Marcada por cuatro hombres que la cambiarán para siempre -el empresario Santiago Carranza, el revolucionario francés Pierre Comte, el periodista estadounidense Albert James y el médico militar vinculado al nazismo Max von Schumann-, la historia de Amelia es la de una antiheroína presa de sus propias contradicciones que cometerá errores que no terminará nunca de pagar y que acabará sufriendo, en carne propia, el azote despiadado tanto del nazismo como de la dictadura soviética.
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Déjate atrapar por el sports romance de Ana Huang en esta increíble edición especial.
Ella es la única mujer que desea… y la única que no puede tener.
Asher Donovan es una leyenda de fútbol, pero su actitud deja mucho que desear. Su reciente transferencia de equipo ha sido controvertida y ahora su antiguo rival, Vincent, es su compañero. Cuando su disputa les cuesta un campeonato, ambos se ven obligados a entrenar juntos fuera de temporada.
Sobrevivir al verano no debería ser difícil... hasta que conoce a su nueva entrenadora. Atractiva y con talento, le resulta imposible dejar de pensar en ella. ¿El único problema? Que es la hermana de su rival.
EROS es conocido por su belleza, pero también por no tener miramientos a la hora de derramar sangre. Sin embargo, cuando Psique se cruce en su camino descubrirá que quizá no es solamente el despiadado secuaz de su madre, Afrodita, sino que está dispuesto a desafiar el orden establecido por poner a salvo a una chica a la que apenas conoce.
PSIQUE es la más prudente, astuta y discreta de las populares hermanas Dimitriou. Cuando se vea envuelta en una de las tramas de poder de su madre, Deméter, deberá tomar la arriesgada decisión de casarse en Olimpo.
Aunque fingir amor les resulta complicado, pronto descubrirán que lo difícil es mantener la cabeza fría y no dejarse llevar por la atracción física que tratan de disimular.
In Discipline is Destiny, Holiday draws on the stories of historical figures we can emulate as pillars of self-discipline, including Lou Gehrig, Queen Elizabeth II, boxer Floyd Patterson, Marcus Aurelius and writer Toni Morrison, as well as the cautionary tales of Napoleon, F. Scott Fitzgerald and Babe Ruth. Through these engaging examples, Holiday teaches readers the power of self-discipline and balance, and cautions against the perils of extravagance and hedonism.
At the heart of Stoicism are four simple virtues: courage, temperance, justice, and wisdom. Everything else, the Stoics believed, flows from them. Discipline is Destiny will guide readers down the path to self-mastery, upon which all the other virtues depend. Discipline is predictive. You cannot succeed without it. And if you lose it, you cannot help but bring yourself failure and unhappiness.