La pasión según G. H., para muchos la obra maestra de Clarice Lispector, es la confirmación de la autora como un clásico del siglo XX.
G. H. –nunca sabremos el nombre y apellido de la protagonista– es una mujer independiente, escultora amateur y bien relacionada en los círculos más influyentes de Río de Janeiro. Un día, sola en su ático, encuentra una cucaracha. Esto provocará en ella arcadas de repulsión y un caudal de reflexiones íntimas, algunas hasta entonces desconocidas para ella misma, sobre sus sentimientos, miedos, angustias... Este hecho aparentemente intrascendente le servirá para repasar su vida desde la infancia y llegar así a la determinación de vencer todos sus miedos.
El amor llevado a sus últimas consecuencias. Desideria Oliván, una joven de Huesca con decepciones matrimoniales, en el curso de un viaje turístico por Turquía descubre repentinamente la pasión amorosa más avasalladora en los brazos de Yamam, y, a pesar de que no sabe casi nada de él, lo deja todo para vivir a su lado en Estambul. Pasa el tiempo, y la intensidad de este amor persiste, pero las relaciones de los dos amantes se van haciendo cada vez más dramáticas y más sórdidas, hasta que el reencuentro de Desideria con un antiguo amigo suyo que pertenece a la Interpol revela la verdadera naturaleza de las actividades lucrativas de Yamam. La historia, admirablemente contada a través de unos supuestos cuadernos íntimos de la protagonista, constituye una amarga meditación sobre el amor llevado a sus últimas consecuencias en medio de un clima muy patético, hasta la destrucción física y moral, que Antonio Gala sabe describir con la irresistible fuerza de su estilo.
Las cartas de James Joyce son, sin duda, uno de sus grandes tesoros literarios, una ventana indiscreta y una aproximación emocionante a su oficio de escritor, pero también a su personalidad más íntima y secreta. Sentados delante de este fresco incomparable, vemos desfilar su personalidad abrasadora e indomable, sus celos incontrolables, un sorprendente apego a la familia y una inmensa angustia mientras compagina, en un difícil equilibrio, las ansias de creación literaria con su angustia por publicar: la certeza de que él es un escritor imbatible, convencido de su superioridad intelectual.Recibidas al principio como un documento de vital importancia, estas cartas se han convertido con el tiempo en una parte esencial de la obra de Joyce, una cima literaria en sí misma, la prueba concluyente de que fue uno de esos extraños talentos que transformó en material artístico incluso lo que no tenía intención de publicar. La selección canónica de Richard Ellmann y la traducción impecable de Carlos Manzano convierten a esta edición en la definitiva en nuestra lengua.
El tío Celan era serísimo como los candelabros; sostenía la mirada y saltaba los siglos; sabía que hay edificios umbrosos, terribles, sin estilo resuelto de antemano; estilo alpino, estilo garaje, estilo japonés, sin estilo; por eso no dormía o dormía caminando cuando usaba palabras en el sueño de cuarzo, de ámbar, sin moscas, de granito fragmento de “Capítulo tío Celan”, de Luis Moreno Villamediana Luis Moreno Villamediana (Venezuela, 1966).
La peste, la gran obra del autor francés que se ha convertido en uno de los libros más vendidos del momento en Europa.
Ambientada a fines de los años cuarenta del siglo XX en Orán, La peste narra las vicisitudes de una ciudad cerrada durante un inesperado brote de peste bubónica. La trama es sencilla y va desde el contagio inicial hasta el final de la epidemia, pero la hondura de sus planteamientos, así como la humanidad de sus personajes, hace del libro uno de los más memorables de la literatura moderna.
Ya en fechas de su publicación original, el autor confirmó lo que muchos lectores veían por sí solos: la epidemia era una alegoría de la ocupación nazi en Francia. Sin embargo, ese paralelismo no agota la capacidad profética del relato, que advierte sobre los peligros invisibles que acechan a toda sociedad moderna.
Sin falso voluntarismo, Camus defiende la rectitud y la solidaridad generales, poniendo de relieve el heroísmo de las personas ordinarias que actúan de manera extraordinaria por dignidad. Novela imprescindible del Premio Nobel de Literatura, La peste no solo perdura como una de las grandes obras de imaginación moral del siglo pasado, sino que sigue orientándonos en tiempos de desconcierto
Una tragicomedia irlandesa tan hilarante como desgarradora.
Les presentamos a los Barnes, una familia irlandesa infeliz de cuatro maneras diferentes.
El padre, Dickie, regenta un concesionario de coches heredado de su progenitor. Las cosas le iban razonablemente bien hasta que la crisis económica (y quizá también su heterodoxa labia de vendedor) empezó a afectar a las ventas. La madre, Imelda, viene de una familia humilde y es conocida por ser la mujer más hermosa del pueblo. En realidad, ella estaba enamorada de Frank, el hermano carismático —y fallecido— de Dickie, y ahora ambos arrastran un pasado con zonas oscuras.
En cuanto a los hijos: Cass es una adolescente en pleno descubrimiento del sexo y el alcohol que sueña con dejar esa maldita ciudad provinciana y marcharse a estudiar a Dublín. Mientras, mantiene una relación ambivalente, de devoción rabiosa, con su amiga del alma Elaine. Y el benjamín, PJ, sufre acoso en el colegio y teme que sus padres se divorcien, por lo que se refugia en los videojuegos. Allí conecta con un amigo virtual que puede no ser lo que parece...