Thomas Newton aterriza en Kentucky escapando de su planeta, Anthea, que ha sido devastado por las guerras nucleares y cuyos habitantes son el doble de inteligentes que los humanos. Adopta una apariencia humanoide y se pone manos a la obra para traer a sus compañeros alienígenas y salvarlos de la extinción. Pero su trabajo y la avanzada tecnología antheana que utiliza llaman la atención de Nathan Bryce, profesor de química que no tarda en presumir que Newton esconde algo bajo la superficie. A medida que Bryce y el gobierno estadounidense se vayan acercando cada vez más a su sospechoso, Newton deberá luchar por mantenerse fiel a su misión y salvar a sus congéneres de una muerte segura. Y si bien los humanos son menos avanzados que los antheanos, en ocasiones pueden ser mucho más peligrosos.
El hombre que amaba a 1os perros: Iván, aspirante a escritor y ahora responsable de un paupérrimo gabinete de veterinaria de La Habana, recuerda sus encuentros con un solitario personaje que solía pasear por la playa en compañía de dos galgos. Gracias a las confidencias de ese hombre, Iván puede reconstruir las trayectorias vitales de León Trotski y de su célebre asesino, Ramón Mercader, y de cómo se convirtieron en víctima y verdugo de uno de los crímenes más reveladores de la historia.
Leonardo Padura (La Habana, 1955) ha publicado ensayos, cuentos y novelas. Es conocido sobre todo por la serie de novelas policiacas protagonizadas por el detective Mario Conde, merecedoras de premios como el Café Gijón 1995, el Premio de las Islas 2000 y el Premio Hammett 2005. Finalista del Premio Libro del Año 2009 de los libreros madrileños, y traducida a varias lenguas, El hombre que amaba a los perros es una apasionante novela sobre dos personajes muy singulares y, al mismo tiempo, una inquietante indagación histórica en las razones por las que se pervirtió la gran utopía del siglo xx.
En 2004, tras la muerte de su mujer, Iván, que soñaba con dedicarse a escribir, regenta una modesta consulta veterinaria de La Habana. Y es el dolor de esa pérdida que le hace volver sobre un episodio de su vida, ocurrido a finales de los años setenta, cuando conoció a un enigmático hombre que paseaba por la playa en compañía de dos imponentes galgos rusos. Tras varios encuentros, el misterioso personaje comenzó a hacerlo depositario de unas singulares confidencias que lo llevan a la figura del asesino de Trotski, Ramón Mercader. Y gracias a esas conversaciones, Iván puede reconstruir la trayectoria de Liev Davídovich Bronstein, conocido como Trotski, y de Ramón Mercader, que se ocultaba bajo el nombre de Jacques Mornard, y cómo se convierten en víctima y verdugo de uno de los crímenes más reveladores del siglo xx. Desde el destierro impuesto por Stalin a Trotski en 1929, y la infancia de Mercader en la Barcelona burguesa, sus amores y peripecias durante la Guerra Civil, o más adelante en Moscú y París, las vidas de ambos se entrelazan hasta confluir en México. Y ambas historias completan su sentido cuando sobre ellas proyecta Iván sus avatares vitales e intelectuales en la Cuba contemporánea y su extraña relación con el hombre de los galgos en la playa.