El señor y la señora Pounds han contratado a Winifred Notty para que cumpla el rol de la perfecta institutriz victoriana: dará clases a sus pupilos (francés y costura a Drusilla y álgebra e historia al pequeño Andrew) y les contará cuentos antes de dormir. Pero Ensor House y sus habitantes ocultan más perversiones y secretos que la perturbada señorita Notty, capaz de convertir un té con elegantes invitados y bebés en el salón en un acontecimiento macabro. ¿Qué ha pasado en su vida para que una fría mañana de Navidad todas las piezas del pasado y el presente encajen y un final opuesto al de un cuento de hadas nos estremezca como un regalo sangriento?
Cruelmente divertida, clásica y moderna, y dickensianamente escalofriante, Victorian Psycho confirma el original talento de «la nueva dama del thriller» (Ángeles López, La Razón).
El ingenio de Millás y la sabiduría de Arsuaga unidos para contar la vida como la mejor de las historias
UNO DE LOS MEJORES LIBROS DE 2021 SEGÚN EL HUFFPOST
Y LIBRO DEL VERANO SEGÚN TRENDENCIAS
"Una maravilla. Un libro lleno de humor y de bondad. Sí, bondad. Un libro que busca entender el misterio de la vida."
Manuel Vilas
"-Tú y yo podríamos asociarnos para hablar de la vida; levantaríamos un gran relato sobre la existencia. ¿Lo hacemos? -dijo el escritor.
-Lo hacemos -contestó el paleontólogo."
Hace años que el interes por entender la vida, sus orígenes y su evolución resuena en la cabeza de Juan Jose Millás, de manera que se dispuso a conocer, junto a uno de los mayores especialistas de este país en la materia, Juan Luis Arsuaga, por que somos como somos y que nos ha llevado hasta donde estamos. La sabiduría del paleontólogo se combina en este libro con el ingenio y la mirada personal y sorprendente que tiene el escritor sobre la realidad. Porque Millás es un neandertal (o eso dice), y Arsuaga, a sus ojos, un sapiens.
En Vida de este chico, Tobias Wolff narra sus recuerdos de niño y adolescente, cuando, divorciados sus padres, recorría con su madre con la que formaba una auténtica «pareja telepática» las carreteras de Estados Unidos de un lado a otro del país.
Toby o Jack, como le gusta llamarse a sí mismo en homenaje a su adorado Jack London absorberá entre mapas, whisky, peleas a puñetazos, amistades y traiciones, la esencia de esa América de los años cincuenta que marcará irremediablemente su juventud. Una juventud con toques minimalistas y dickensianos a un tiempo y que sirve aquí a su autor para trazar con humor y ternura el retrato de un tiempo pasado en el espejo de su propia imagen.