Un libro imprescindible para los tiempos que vivimos, que nos arma de argumentos en el debate presente sobre el cambio de modelo y que nos señala el camino hacia un mundo mejor y más justo. ¿Cuál es el origen de ese afán por regular, imponer normas y burocratizar todos y cada uno de los aspectos de nuestra vida? Y lo más importante, ¿hasta qué punto nos arruina la vida toda esa cantidad de formularios, procedimientos y documentación? Graeber pone luz a las distintas formas con las que la burocracia se inmiscuye en nuestro día a día, revelando hasta qué punto llega a determinar nuestras vidas. Un interminable y abominable papeleo que anula la creatividad y consume gran parte del tiempo. El avance tecnológico se ha descubierto así como otro mecanismo más de control, mucho más poderoso, al que sin embargo nos hemos plegado sin oponer resistencia, seducidos por sus encantos. Navegando desde el influjo de la economía liberal de la segunda mitad del siglo xx hasta el significado oculto tras personajes como James Bond, Sherlock Holmes o Batman, este libro es un notable trabajo de teoría social en la tradición de autores como Foucault, Marcuse o el mismo Marx.
Con La riqueza de las naciones, su obra más famosa, Adam Smith ha sido considerado el santo patrón del capitalismo. Sin embargo, muy pocos saben cuánto tenía que decir el filósofo escocés sobre el comportamiento humano: sobre cómo nos percibimos a nosotros mismos, cómo nos relacionamos y qué decisiones tomamos en nuestra búsqueda de la felicidad. Smith desarrolló sus ideas sobre la naturaleza humana en una obra genial, La teoría de los sentimientos morales. La mayoría de los economistas nunca la han leído, y durante mucho tiempo el economista Russell Roberts no fue una excepción. Pero cuando finalmente se adentró en este libro del fundador de su disciplina, se dio cuenta de que probablemente se encontraba ante la mejor obra para conocerse a sí mismo que hubiera leído jamás. En Cómo Adam Smith puede cambiar tu vida, Roberts examina esta obra maestra relegada a menudo a un segundo plano y desvela el valioso tesoro de una sabiduría práctica e intemporal. La descripción que hace Smith de la naturaleza humana es tan relevante hoy como hace doscientos años. ¿Qué puede hacernos verdaderamente felices? ¿Conseguir la fama y la fortuna o el respeto de nuestros amigos y nuestra familia? ¿Se puede hacer del mundo un lugar mejor? Las inesperadas respuestas de Smith, cuando las enmarcamos en el rico contexto actual, la literatura, la historia y la cultura pop, resultan ser profundas y paradójicas, a la vez que enormemente entretenidas.
La teoría filosófica que ha inspirado a filántropos como Bill Gates o Elon Musk
Dejar un futuro próspero a las generaciones venideras es una obligación moral
La historia escrita de la humanidad apenas abarca cinco mil años. Podría decirse que nuestra andadura sobre la Tierra no ha hecho más que empezar: el futuro de nuestra especie podría durar millones de años o podría terminar mañana. Todo depende de lo que decidamos hoy.
En Lo que le debemos al futuro, el autor desarrolla su teoría del largoplacismo, que ha sido elogiada por pensadores de la talla de Peter Singer o Steven Pinker, y que ha inspirado a filántropos como Bill Gates o Elon Musk.
MacAskill defiende que también debemos tener en cuenta a las personas que aún no existen y demuestra que influir positivamente en el futuro de la humanidad es la mayor prioridad moral de nuestro tiempo.
El autor se ocupa en estas páginas de los riesgos que nos amenazan. No podemos predecir lo que está por llegar, pero sí anticipar que asuntos como la inteligencia artificial, la cronificación de las pandemias, la guerra nuclear, el renacimiento del totalitarismo o el cambio climático extremo serán peligros existenciales que debemos mitigar cuanto antes.
Brian Greene nos explica en este libro cómo las grandes teorías de la relatividad y de la mecánica cuántica nos han conducido al mayor problema con que se enfrenta la Física hoy en día: la búsqueda de una ley que unifique a todas las demás, una ley que Einstein persiguió en vano durante treinta años y a la que se le da el nombre de «teoría de supercuerdas». Con maestría, claridad y un profundo conocimiento, Greene nos ofrece en la aportación más brillante que se ha escrito hasta ahora para hacer accesible al gran público este último misterio de la naturaleza que nos explicaría, finalmente, todo.