Para Jack, un niño de cinco años, la habitación es el mundo entero,el lugar donde nació,donde come,juega y aprende.Por la noche,Mamá lo pone a dormir en el armario,por si viene el viejo Nick... Para su madre, la habitación es el cubículo donde lleva siete años encerrada.Con gran tesón e ingenio,ha creado en ese reducido espacio una vida para su hijo, y su amor por él es lo único que le permite soportar lo insoportable. Pero la curiosidad de uno crece a la par que la desesperación de la otra.Solo queda urdir la huida,un plan más arriesgado de lo que ambos pueden llegar a imaginar.
"Desconcertante, lista a inquietar a la crítica, está ya en los escaparates la primera novela de Juan Rulfo, Pedro Páramo, que transcurre en una serie de transposiciones oníricas, ahondando más allá de la muerte de sus personajes, que uno no sabe en qué momento son sueño, vida, fábula, verdad, pero a los que se les oye la voz al través de la "perspicacia despiadada y certera" de tan sin duda extraordinario escritor." Con estas palabras iniciaba Edmundo Valadés la primera reseña de Pedro Páramo, aparecida el 30 de marzo de 1955 y conservada por Rulfo entre sus papeles.
La redención del amor a través de la entrega total. Descubre en El vencedor está solo un intenso, sincero y bien documentado viaje hacia nuestra fascinación por la fama, el éxito y el dinero. En el atractivo entorno del festival de Cannes, durante 24 horas seguiremos los pasos de Igor, un empresario ruso cuya aparición transformará la vida de quienes le rodean. Adéntrate en la obra de un autor provocador y valiente que rompe con los esquemas preconcebidos de nuestra sociedad. Un fenómeno literario con millones de seguidores en las redes sociales. Ambientada en el atractivo entorno del festival de Cannes, El vencedor está solo va mucho más allá del lujo y del glamour, y nos aboca a una profunda reflexión acerca de los propios sueños y de cuál es la escala de valores con la cual nos medimos.
Primer volumen de la serie Mundodisco de Terry Pratchett.
En un mundo plano sostenido por cuatro elefantes impasibles -que se apoyan en la espalda de una tortuga gigante- habitan los estrafalarios personajes de esta novela: un hechicero avaro y torpe, un turista ingenuo cuyo fiero equipaje le sigue a todas partes sostenido por cientos de patitas, dragones que solo existen si se cree en ellos, gremios de ladrones y asesinos, espadas mágicas, la Muerte y, por supuesto, un extenso catálogo de magos y demonios...
En esta serie de novelas se dan cita todos los temas y situaciones del género fantástico, vistos a través del personalísimo y corrosivo sentido de la comicidad de un autor inglés que se ha convertido en uno de los escritores de humor de mayor éxito y fama en el mundo.
La novela narra la historia de David Kepesh, quien se convierte en un pecho de 155 libras. Durante la novela, Kepesh enfrenta una lucha interna: parte de él desea sucumbir a sus deseos carnales, mientras que otra parte desea ser un ser racional. Kepesh, un profesor de literatura, compara su desdicha con la de Gregor Samsa en La metamorfosis de Kafka y la de Kovaliov en La nariz de Gógol. Asimismo, describe sus sensaciones sexuales mientras los enfermeros lo cuidan y cómo su novia practica sexo oral en su pezón.
Diez años despues de la publicación de su aclamada Las rosas de piedra, Julio Llamazares concluye su recorrido por España y su historia a traves de las catedrales
Cuando se cumplen diez años de la publicación de su memorable Las rosas de piedra, Julio Llamazares concluye con este libro el que sin duda es el proyecto literario en español más importante de las ºltimas decadas: su recorrido por las setenta y cinco catedrales de España.
Como hicieran los viajeros de otra epoca, despues de recorrer todas las del norte, el autor va de Madrid a las islas Canarias, pasando por Extremadura, Castilla-La Mancha, Levante, Andalucía y las Baleares, describiendo de manera minuciosa y con una mirada humanista -no exenta en ocasiones de ironía y crítica-, cada una de las catedrales erigidas en esta zona de la geografía española. Algunas de ellas son visitadas por el por primera vez; otras, redescubiertas. Pero en todas ellas Llamazares sabe hallar ese hilo que las une con las gentes que las visitan por turismo o devoción, por curiosidad o costumbre.