Las joyas son fieles guardianas no solo del paso del tiempo, sino de los grandes secretos de amor y desamor de quienes las han llevado. Las reinas las han lucido como amuletos y también como signos de poder.
En estas páginas se da una visión diferente y original de Victoria Eugenia de Battemberg, la última reina española antes de la Segunda República. Llegó de Inglaterra a España en 1906 para contraer matrimonio con Alfonso XIII, trayendo consigo un aire nuevo a la Corte y suscitando muchas críticas por lo que se consideraban transgresiones. Entre conspiraciones políticas, atentados, desengaños y el exilio, transcurrió su existencia.
Mientras su vida se iba desmoronando debido a la enfermedad de la sangre que heredaron algunos de sus hijos y a las constantes infidelidades del rey, su joyero, Ramiro García-Ansorena, le fue enseñando la historia y la vida de las reinas de España a través de sus joyas. También le hizo comprender que los diamantes, las perlas y las piedras preciosas serían su fuerza y su seguridad: «Una joya es lo único que dura para siempre». Su extraordinario collar de brillantes fue creciendo a la par que el desamor del rey hacia ella, ya que él le regalaba joyas para comprar su perdón.
Victoria Eugenia, Ena, dejó en su testamento las «joyas de pasar» que hoy están en manos de la reina Letizia. Todas ellas albergan secretos, algunos terribles. Como dice la protagonista: «¿Es cierto que ser reina no da la felicidad».
Novela fue finalista del Premio Minotauro 2020.
En 1840, Edgar Allan Poe publicó “El hombre de la multitud”, uno de sus cuentos más intrigantes, un recorrido alucinado por el Londres victoriano tras los pasos de una figura enigmática que transita las calles sin descanso.
En la Barcelona contemporánea, Ana y Alba, son dos amigas a punto de terminar el instituto, inadaptadas y amantes de la literatura y del cine de terror, que tratarán de conjurar la mediocridad que les rodea a través de las palabras del maestro del relato gótico. Su obsesión por “El hombre de la multitud” les llevará a improvisar un juego tan inocente como peligroso. Tan solo son dos chicas en busca de algo de magia, pero nada puede prepararlas para lo que están a punto de encontrar.
Terror e intriga bajo la poderosa premisa de una de las historias emblemáticas de Edgar Allan Poe.
Si hay un relato que sin duda derrumba la visión idílica y edulcorada de la maternidad, ese es sin duda Fugaz. Su protagonista vive el embarazo y la crianza como una huida hacia delante, una forma de soltar amarras en la que cada etapa es un nuevo comienzo, un aprendizaje para el que nadie la ha preparado. Lo cierto es que no todo son sinsabores en la relación de esta joven madre con su recién nacido, pero en este viaje, una aventura a través del territorio argentino, el lector verá crecer a ese niño, reclamar el pecho de la madre hasta dejarla exhausta, y a ella desesperarse e incluso dudar de esa vida sin asideros. Hasta que madre e hijo recalan en un lejano lugar de la costa argentina, donde nadie sabe por qué, como una macabra ofrenda de la tierra, las ballenas quedan varadas.
Benson y Mike son una pareja gay residente en Houston. Benson es afroamericano y trabaja como profesor en una guardería. Mike es de origen japonés y es chef en un restaurante mexicano. Su existencia en común empieza a mostrar algunas grietas y a verse amenazada por la monotonía. Esa monotonía la romperán una serie de acontecimientos no precisamente felices que sacudirán sus vidas.
DAVID HERNÁNDEZ SEVILLANO nació en Segovia (España) en 1977. Ha publicado siete poemarios entre los que destacan Razones de más, Premio Nacional de Poesía Miguel Hernández 2009, y El peso que nos une, XXV Premio de Poesía Hiperión. «El reloj de Mallory detiene el tiempo en la escalada hacia las cumbres de la cotidianidad. Una lectura sin oxígeno que oxigena los símbolos transidos al filo de lo invisible, poesía que se enfrenta al riesgo con el sencillo objetivo de conquistar lo que creíamos conquistado: el amor, la felicidad, la cima de cada día. David Hernández Sevillano es ya un escalador experimentado cuyo campamento base se sitúa a una altura a la que muchos querrían aspirar. Imposible no leer en el reloj sin manecillas de George Mallory una metáfora de la futilidad de la poesía, imposible no leer en el misterio de su cuerpo momificado la fatalidad de la poesía, imposible no imaginar en su empeño último la felicidad de toda la poesía.»
Madrugada,la nueva novela de Gustavo Rodríguez, aborda la ausencia del padre en un país lleno de prejuicios y violencia.
A pesar de que en treinta años de vida no lo conoció, Trinidad Ríos necesita encontrar a su padre. Ella tiene miedo de ser rechazada, aunque el miedo no le es inusual: toda su vida, desde la madrugada que quedó huérfana en la salvaje jungla de Madre de Dios, en la selva sur del Perú, hasta que tuvo que escapar a la ciudad de Lima, ha tenido que luchar contra tratantes de mujeres, mineros ilegales, trabas machistas y una sociedad extremadamente racista.
Se podría decir que hasta ahora ha sobrevivido con éxito, pero una enfermedad producida por contaminación de mercurio la obliga a buscar a la única persona en el mundo que puede salvarla a través de un trasplante. ¿La aceptará su padre, un cantante bipolar que se gana la vida imitando a los Bee Gees y que ignora su existencia? Y si la acepta, ¿estará dispuesto a dejar su único sueño solo por salvar la vida de su hija?
«Rodríguez es una de esas voces que sorprenden, justamente porque no se jacta de alimentarse solo de la literatura. También cree en la calle y en su mirada y en sí mismo. Más que escribir, a veces da la impresión de que lo que hace es conversar.»