"En Versalles, florecerás como una flor exótica.
Los vampiros en el palacio se vuelven locos por cualquier cosa fuera de lo común.
Pero cuidado: La Corte de las Tinieblas tiene sus códigos y sus trampas mortales,
el más mínimo error tiene que pagarse con sangre…"
PARÍS, LA CIUDAD DE LA LUZ, AHORA SE HA CONVERTIDO EN LA CIUDAD DE LAS SOMBRAS.
"En la Corte de los Milagros, los sueños más maravillosos cobran vida… así como también lo hacen las pesadillas más terroríficas."
A los ojos de Versalles, Diane de Gastefriche es la favorita de Luis XIV, el vampiro supremo que durante trescientos años ha impuesto su yugo sangriento sobre Francia y Europa. En realidad, su nombre es Jeanne Froidelac: pertenece a la Fronda, una organización secreta que trabaja para desmantelar el imperio del Rey de las Tinieblas.
En el vientre de París aparece un misterioso vampiro renegado, que reina sobre una corte subterránea poblada por demonios y abominaciones. Luis XIV intenta capturar a este escurridizo rival y apropiarse de su ejército; esto lo haría más poderoso que nunca. ¿Conseguirá Jeanne eliminar a la Dama de los Milagros antes de que el Rey de las Tinieblas la capture?
A través de este nuevo volumen de la saga Vampyria, Victor Dixen consolida la figura del vampiro y conduce a los lectores a través de una aventura fantástica y trepidante, llena de ritmo. Una inmersión emocionante en las sombras de un eterno Grand Siècle. Una épica fantástica y barroca sobre el fin de los tiempos.
A veces, quien más te quiere es quién más daño te hace.
Lily no siempre lo ha tenido fácil. Por eso, su idílica relación con un magnífico neurocirujano llamado Ryle Kincaid, parece demasiado buena para ser verdad. Cuando Atlas, su primer amor, reaparece repentinamente y Ryle comienza a mostrar su verdadera cara, todo lo que Lily ha construido con él se ve amenazado.
La vida tiende a ser así: una gota, una gota, una gota, una gota, y luego nos preguntamos, perplejos, cómo es que estamos empapados.
Estela deja a su madre en el sur para trabajar en la casa de una familia en Santiago de Chile y allí se queda los siguientes siete años, limpiando y criando a una niña acosada por la ansiedad, cuya muerte conocemos al comienzo de la novela.
Como en una tragedia griega, la tensión crece en cada página, con cada personaje o elemento: la perra callejera, las ratas, la confesión inconfesable del «señor», la aparición de Carlos, el veneno, la pistola, hasta un desenlace tan poderoso como inevitable.
Karl Marx dejó tras de sí un impresionante legado teórico y una descendencia extensa. Dejó también un vástago adicional, hijo de la criada de la casa, al que nunca quiso reconocer y que entregó a su compañero, Engels. A través de otra hija bastarda de Marx, fruto de la aventura con una aristócrata rusa, Clara Obligado retrata toda una educación amorosa y sexual —no hay variante que no encuentre su preciso y sugerente relato—, y conforma el fresco detallado de una época espléndida. ¿Y si la aristocracia rusa en el exilio, en lugar de hacer la revolución política, hubiera iniciado una revolución sexual? ¿Y si la Historia, en lugar de contarse en masculino, se hubiera contado en femenino?
La hija de Marx es un prodigio literario lleno de imaginación, documentación rigurosa (modelos de consoladores incluidos), erotismo e ironía; una crónica aguda y suntuosa de los destinos de aquellas mujeres que rodearon a los revolucionarios, utopistas y reformadores del cambio de siglo.
La plácida existencia de Francesca, casada y con dos hijos, se ve completamente sacudida por la llegada de Robert Kincaid, un fotógrafo nómada, libre y generoso, que transforma en ternura toda su energía. El destino los une inexorablemente cuando se encuentran en el otoño de sus vidas. Su amor, corto como una tarde madura, fue sin embargo tan profundo como las raíces de un árbol. Sus cenizas se encuentran esparcidas muy cerca de los puentes de Madison. Y, así, en apenas doscientas páginas, Robert James Waller nos devuelve el gusto de recordar que la pasión no tiene edad en una novela que es ya un clásico que se recomienda de generación en generación.
Lola Acosta viaja de Madrid a Londres tras la pista de su padre biológico, Peter Russ, la mayor estrella de la música española de los noventa, que desapareció veintitrés años atrás al inicio del concierto más importante de su carrera. Su investigación irá revelando cómo el suceso transformó a todo su entorno: el hermano del cantante, la exnovia, el mánager, los amigos, el padre, la madrastra... Poco a poco, Lola descubrirá qué le sucedió a su padre hasta conocer una verdad que quizá hubiera estado mejor escondida.
Una historia adictiva que habla de los pecados de juventud, las relaciones sentimentales prohibidas, la crueldad de los celos y la envidia y la épica del amor a través de una trama tejida con mucha habilidad y narrada mediante una prosa sencilla y virtuosa.
Una magnífica novela plagada de intrigas y secretos que explora los claroscuros del amor y la familia con la música como hilo conductor y la nostalgia de los noventa como telón de fondo