El adjetivo gótico nos remite a un paisaje nocturno, plagado de árboles retorcidos, nubes pálidas, sonidos inquietantes y vislumbres de cementerio. Un imaginario que en buena medida se forjó entre los poetas románticos ingleses y sus sucesores. Lejos de ser un género cultivado por poetas de segundo rango, nuestra selección recurre a nombres que están en la cima de su arte: se abre con dos inquietantes poemas de Shakespeare, para recorrer después las grandes aportaciones de los románticos, encontrarnos con el maestro indiscutido del género: Edgar Allan Poe; las hermanas Brontë, los espectros del recuerdo de Hardy y la feérica Irlanda de Wilde y Yeats antes de despedirnos entre la penumbra onírica de Charlotte Mew.
Durante siglos, los Carryx han destruido o esclavizado en toda la galaxia. Pero ahora se enfrentan a un enemigo inmortal, y la clave para su supervivencia está en manos de los humanos del planeta Anjiin.
Las naves Carryx descienden y se llevan a los mejores humanos; entre ellos, a Dafyd Alkhor -asistente de un brillante científico. Todos son abandonados en una lucha contra otras especies con la extinción como precio del fracaso. Solo Dafyd y algunos compañeros comprenden que para sobrevivir deberán comprender (y manipular) a los propios Carryx. Y al hacerlo, Dafyd se convertirá en el hombre más odiado de la historia y el guardián de su pueblo.
Monta Clare, Misuri, 1975. Mientras la guerra de Vietnam llega a su fin y Muhammad Ali se enfrenta a Joe Frazier, la desaparición de varias niñas quiebra la sensación de seguridad característica de esa pequeña comunidad, que se agrava cuando Joseph Patch Macauley es secuestrado. Su mejor amiga, Saint Brown, se propondrá encontrarlo a toda costa, pero, pese a sus esfuerzos, Patch permanecerá casi un año en total oscuridad en un sótano con la única compañía de una niña llamada Grace, a quien escucha, pero nunca ve, y que lo visita en secreto. Tras ser liberado, la búsqueda de Grace se convertirá en el hilo conductor de la vida de Patch, que tomará giros insospechados a lo largo de dos décadas, mientras Saint luchará por hallar la verdad y recuperar a su amigo, a quien cree perdido en un oscuro recuerdo.
Melancólico y algo fatalista, soltero y con una novia en Génova a quien ve muy de vez en cuando, y amante de la buena mesa, Salvo Montalbano es comisario de policía en Vigàta, un pequeño pueblo siciliano que, pese a no figurar en ningún mapa, encarna la esencia de la cultura mediterránea.
Los seguidores de la serie negra europea más aclamada encontrarán en esta edición tres casos en los que el entrañable comisario, sabio intérprete del arte de vivir, se supera a sí mismo y vuelve a emocionar a los lectores con su infalible perspicacia y su implacable sentido de la justicia. En La voz del violín, Montalbano no se da por vencido ni por convencido cuando muere el principal sospechoso del asesinato de una hermosa joven, esposa de un médico boloñés, cuyo cadáver aparece desnudo en el chalet de ambos.
Salvo Montalbano tiene cuarenta y cinco años, una novia en Génova y es comisario de policía de Vigàta, en Sicilia, un pequeño pueblo que, si bien no aparece en ningún mapa, es tan real como la vida misma.
Fiel amigo de sus amigos, amante de la buena mesa y sabedor de que la tierra ha girado y seguirá girando en torno al sol, Montalbano encarna la esencia de la cultura mediterránea. Su temperamento melancólico, su implacable sentido de la justicia, rayana en lo quijotesco, así como su infalible perspicacia, lo han convertido en un héroe verdaderamente popular, cuyas historias son devoradas con fruición por millones de incondicionales lectores en todo el mundo.
A Daphne siempre le había encantado la forma en que Peter, su prometido, contaba su historia. Cómo se conocieron, se enamoraron y regresaron a la ciudad natal de él, a orillas de un lago, para empezar una vida en común. Se le daba realmente bien explicarlo. hasta que se dio cuenta de que, en realidad, estaba enamorado de Petra, su mejor amiga de la infancia.
Y así es como Daphne empieza su nueva vida: en la hermosa Bahía de Waning, Michigan, lejos de su familia y amigos, pero con un trabajo idílico de bibliotecaria infantil (con el que a duras penas llega a fin de mes). Por eso, se plantea compartir piso con la única persona que podría entender cómo se siente: Miles Nowak, el exnovio de Petra.