Memorias de una joven formal traza las primeras etapas de un aprendizaje -existir sin concesiones a falsos ideales o autoengaños- y culmina con un gran encuentro; recién ingresada en la Sorbona, Simone de Beauvoir traba amistad con alguien a quien acaba de conocer, Jean-Paul Sartre, que le dice: "A partir de ahora la tomo entre mis manos".
SIMONE DE BEAUVOIR (1908-1986), escritora francesa, fue también inseparable compañera de Jean-Paul Sartre durante más de cincuenta años. Su obra abarca tres vertientes: la literaria (La invitada. Los mandarines), la ensayística (El segundo sexo) y la memorialistica (Memorias de una joven formol. La plenitud de la vida. La fuerza de las cosas. Final de cuentas y, tras la muerte de Sartre, La ceremonia del adiós).
Traducción de Silvina Bullrich
Adiós, muñeca (1940), considerada por muchos la mejor obra de Raymond Chandier, es su segunda novela. El detective Philip Marlowe emprende la búsqueda apasionada de una cantante pelirroja, se ve envuelto en la escena de un crimen y debe desenredar un turbio asunto de deudas de juego. No tardará en descubrir que una costumbre ha arraigado en Los Ángeles: disparar primero y preguntar después. Esta edición reúne también los tres relatos pulp, publicados en las revistas Black Masky Dime Detective, que Chandier canibalizó para escribir la novela: «El hombre que amaba a los perros» (1936), «Busquen a la chica» (1937) y «El jade del mandarín» (1937).
¿Qué pasa en nuestro interior cuando leemos una novela? Este libro nos lleva a los mundos del escritor y del lector y pone de manifiesto las íntimas conexiones entre ambos. Pamuk recurre a la famosa distinción de Friedrich Schiller entre poetas «ingenuos» (los que escriben con espontaneidad, serenidad y naturalidad) y poetas «sentimentales» (reflexivos, emotivos, inquisidores y sensibles al artificio de la palabra escrita). Remontándose a las novelas de su adolescencia y deteniéndose en las obras de Tolstói, Dostoievski, Stendhal, Flaubert, Proust, Mann y Naipaul, el autor explora la oscilación entre lo ingenuo y lo reflexivo, así como la búsqueda del equilibrio que se encuentra en el corazón mismo del oficio de todo novelista.
Revive la pasión de Cincuenta sombras más oscuras a través de los ojos de Christian Grey. E.L. James vuelve a sumergirnos, con una mirada más oscura y profunda, en el universo de «Cincuenta sombras», la historia de amor que ha seducido a millones de lectores en todo el mundo. Aunque aquella ardiente y sensual relación acabó marcada por el sufrimiento y los reproches, Christian Grey no logra quitarse a Anastasia de la cabeza ni del corazón. Decidido a recuperarla y a amarla aceptando sus condiciones, intenta reprimir sus deseos más oscuros y la necesidad de tenerlo todo bajo control. Sin embargo, las pesadillas de la infancia no dejan de perseguirle y, además, el insidioso jefe de Ana, Jack Hyde, claramente la quiere para él. ¿Podrá el doctor Flynn, psicólogo y confidente de Christian, ayudarle a enfrentarse a sus propios fantasmas, o acabarán la posesiva y seductora maestra Elena y la perturbada Leila, su devota y anterior sumisa, arrastrando a Grey al pasado? Y si finalmente consigue recuperar a Ana, ¿será capaz, un hombre tan oscuro y lastimado, de retenerla a su lado?
"Este libro reúne, en una versión más ampliada, las biografías de mujeres que publiqué en el suplemento dominical de El País. No sé bien dónde encuadrar estos trabajos: aunque están muy documentados, no son ni biografías académicas ni artículos periodísticos, sino unos textos muy apasionados, muy personales. Son historias de mujeres singulares a las que intenté entender. Las hay generosas y las hay malvadas, cobardes o valientes, turbulentas o tímidas; todas son, eso sí, muy originales y algunas resultan pasmosas por lo extraordinario de sus peripecias. Pero creo que, por muy raras que parezcan, siempre podemos reconocernos en ellas. Y es que cada uno de nosotros encierra dentro de si todas las vidas". Rosa Montero
Laurence lo tiene todo para ser plenamente feliz: joven, hermosa, felizmente casada, con dos hijas, un trabajo en agencia de publicidad y una posición económica acomodada. Incluso tiene un amante que la satisface. Sin embargo, ese deslumbrante envoltorio está empezando a anular su personalidad. Interrogarse acerca de quién es y qué siente realmente la lleva a replantearse toda su vida, sus convicciones, sus juicios y a mirar con nuevos ojos el atractivo mundo en el que ha quedado atrapada. Laurence recuerda aquel rey que transformaba en oro todo lo que tocaba…, pues, a su semejanza, todo lo que ella toca se transforma en imagen. Mediante una equilibrada novela de personaje, Beauvoir nos ofrece una descarnada y muy atinada radiografía de la hipocresía y las mentiras del modelo burgués.