La joven y hermosa Tessa Quayle es asesinada cerca del lago Turkana, en el norte de Kenia. Su supuesto amante africano y compañero de viaje, un médico al servicio de una ONG, ha desaparecido de la escena del crimen.
Justin, el marido de Tessa, aficionado a la jardinería y diplomático en la embajada británica de Nairobi, emprende una particular odisea en busca de los asesinos de su mujer y sus motivos. Sus indagaciones le llevan al Foreign Office de Londres, a distintos países de Europa, a Canadá, de nuevo a África, a lo más profundo de Sudán del Sur, y, finalmente, al mismo lugar donde Tessa murió. En el camino hallará terror, violencia, conspiraciones y verdades incómodas. Pero su mayor logro será descubrir el extraordinario coraje de Tessa, la mujer a la que apenas tuvo tiempo de amar.
Con este mensaje inesperado, el pasado vuelve para sacudir la vida de un antiguo agente secreto cuando ya no tiene el escudo de su organización. Participó en la guerra sucia del Estado, convencido de su causa: la defensa de una sociedad democrática y de las víctimas inocentes contra la violencia terrorista. Pero el tiempo ha pasado, no todo salió bien y la justificación es muy lejana, mientras que él ya no puede abandonar el lado oscuro. La críptica comunicación que acaba de recibir lo reclama de nuevo.
Postrado en el hospital, Mazo necesita que su antiguo camarada Púa le ayude en una misión muy personal que él ya no puede asumir. Su hija corre peligro y tiene que alejarla de la vida que lleva y de quienes la rodean, cueste lo que cueste. Sólo alguien como Púa es capaz de llegar hasta el final para lograrlo. La llamada de su amigo lo devuelve a los días en el filo, la memoria de sus actos y las sombras de su propia naturaleza.
Su protagonista, Christopher Boone, es uno de los más originales que han surgido en el panorama de la narrativa internacional en los últimos años, y está destinado a convertirse en un héroe literario universal de la talla de Oliver Twist y Holden Caulfield. A sus quince años, Christopher conoce las capitales de todos los países del mundo, puede explicar la teoría de la relatividad y recitar los números primos hasta el 7.507, pero le cuesta relacionarse con otros seres humanos. Le gustan las listas, los esquemas y la verdad, pero odia el amarillo, el marrón y el contacto físico. Si bien nunca ha ido solo más allá de la tienda de la esquina, la noche que el perro de una vecina aparece atravesado por un horcón, Christopher decide iniciar la búsqueda del culpable.
Alma tiene diecisiete años, el pelo castaño, la boca un poco grande y los ojos oscuros.
Tiene dos amigas íntimas, Greta y Nata, un puñado de gente con la que se va de fiesta y el recuerdo de una noche que le gustaría olvidar.
Alma también tiene una cuenta en Instagram (@colemanmiller18, con 950K seguidores), aunque nadie sabe que es suya.
Pero de todo lo que Alma tiene, lo más importante está dentro de la mochila negra que lleva a la espalda. Es algo que va a cambiar su vida en un instante.
«Cuidado, aquí se esconde un violador.»
Es lo que dicen las grandes letras color sangre en la tela que Alma acaba de colgar en la fachada de su instituto.
Nora Pennington sabe que un buen libro puede ser el mejor remedio frente a cualquier problema, pero cuando una tarde descubre a una misteriosa joven escondida entre las estanterías de su librería no duda en acogerla y, junto a las demás integrantes del Club Secreto de la Lectura y la Merienda, ayudarla a pasar página. Cuando poco después aparece muerta otra clienta de la librería todo se complica aún más. A pesar de que se descubre una nota de suicidio, las intrépidas amigas del club de lectura deciden ayudar al sheriff novato a detener a un asesino que confirmará que los monstruos y los secretos no solo habitan entre las páginas de los libros.
Estamos a principios de la primavera de 2016 en el castillo de Windsor, donde Isabel II ultima los preparativos de las celebraciones de su nonagésimo aniversario mientras saborea una matutina taza de té.
Pero el ambiente festivo se trunca de pronto cuando uno de sus invitados es hallado muerto en uno de los dormitorios de la residencia.
Todo parece indicar que el joven pianista ruso se ha ahorcado, pero un nudo mal hecho lleva al MI5 a sospechar que hay gato encerrado.
La reina deja la investigación en manos de los profesionales, hasta que las pesquisas apuntan hacia sus fieles sirvientes y decide tomar cartas en el asunto.