Después de pasar cinco años en la cárcel por el trágico error que costó la vida de su gran amor Scott, Kenna Rowan regresa a casa con un único deseo: abrazar a su hija Diem, de cuatro años, que vive con los padres de Scott y a la que no ha visto desde que nació.
La única persona que no le ha cerrado la puerta por completo es Ledger Ward, dueño del bar local y uno de los pocos vínculos que le quedan con Diem. Pero ella sabe que si alguien descubre que Ledger se está convirtiendo lentamente en una parte importante de su vida, crece el riesgo de no recuperar a su hija. Kenna deberá encontrar una manera de reparar los errores de su pasado si quiere construir un nuevo futuro con Ledger.
Tres muchachas comparten piso en Londres. La primera es una fría y eficiente secretaria; la segunda, una talentosa artista; y la tercera sale en busca de Hércules Poirot, interrumpiéndole durante su desayuno de brioche y chocolate caliente, para confesarle que es la asesina de sus otras dos compañeras. Después desaparece misteriosamente.
En medio de rumores sobre armas de fuego, cuchillos automáticos y rastros de sangre, Poirot deberá emplear al máximo sus células grises para establecer, sin evidencia alguna, si la tercera muchacha es efectivamente culpable.
En el tranquilo pueblo de Wychwood, un asesino está a punto de atacar. O, al menos, eso es lo que la señorita Pinkerton le asegura a Luke Fitzwilliam cuando coinciden en un viaje en tren. Y no solo eso, también le anuncia quién será la próxima víctima: el doctor Humbleby. Pese a lo convencida que se muestra la anciana, Luke no decide tomarse en serio sus advertencias, hasta que al día siguiente lee en el periódico que el doctor ha fallecido y que la señorita Pinkerton ha sido víctima de un atropello. Es entonces cuando Luke decide visitar Wychwood haciéndose pasar por escritor en busca de información para su próximo libro.
En esta novela de trazos autobiográficos, Capote relata la historia de una pequeña comunidad norteamericana cuyos cimientos morales se ven conmocionados por un extraño episodio. Collin Fenwick, joven huérfano que vive con las solteronas Talbo, es testigo de la singular relación que une a las dos hermanas: Verena, rígida y avara, la mujer más rica del pueblo, y Dolly, que ha hipotecado su vida al cuidado de su hermana y la casa. Ambas padecen de soledad. Dolly sólo halla distracción en los ratos que pasa con Catherine, una negra que realiza las labores domésticas, y en ocuparse de su curiosa medicina para la hidropesía. La intervención de un pícaro que desvalija a Verena, frustrando de paso sus expectativas sentimentales, desencadena el acontecimiento central: Dolly y Catherine abandonan la casa y se instalan, junto al joven Collin, en la precaria cabaña construida en la cima de un enorme árbol. Este hecho insólito provoca el desconcierto en la buena sociedad del pueblo, entre cuyos preclaros miembros se cuentan un sheriff servil, los brutos de turno y, cómo no, el reverendo y su esposa. Pero los improvisados moradores del árbol también ganan adeptos, como los panaderos County, el joven Henderson y el peculiar juez Cool, que encuentra ocasión de redimir el vacío de su vida...
Tres adolescentes embarazadas.
Las tres se llaman María y son vírgenes.
Un milagro amenaza el futuro de la Iglesia católica.
Un thriller conspirativo y trepidante del autor de La biblioteca de los muertos.
El profesor y arqueólogo Cal Donovan se dirige a Islandia para pasar unas vacaciones con su última novia cuando recibe una llamada del Vaticano. El papa Celestino IV quiere que investigue la extraordinaria aparición de tres jóvenes vírgenes, embarazadas, llamadas María. ¿Se trata de un milagro, como clama el sector más conservador del Vaticano, o existe una explicación científica? ¿Es posible que las tres estén gestando al hijo de Dios? ¿Podría este aparente milagro causar el colapso de la Iglesia católica?
Mateo vuelve al pueblo para acudir a un funeral que lo arrastra inevitablemente a su adolescencia. A aquel verano en que comprendió la importancia de la amistad y de la familia; el verano en que el arte le dio alas; el verano en que se topó no solo con un chico, sino con dos, que le rompieron todos los esquemas; el verano en que, mientras ardían las flores, al fin comenzó a conocerse a sí mismo.