«Muy a menudo dudo de si alguna vez haré imprimir una línea. ¿Sabes qué sería una bella idea la del joven que, hasta los cincuenta años no hubiera publicado nada, y que de golpe, hiciese aparecer, un buen día, sus obras completas y no hiciera nada más?». Con un nivel de autoexigencia artística como pocos autores han demostrado tener, Gustave Flaubert (1821–1880) esperó hasta los treinta y seis años para publicar Madame Bovary, y, sin embargo, quiso privar a sus lectores de la mayor parte de su narrativa breve previa que, sin duda, está a la altura en calidad e importancia al resto de su obra. Gran parte del valor de esta edición de sus Cuentos completos reside en reunir por primera vez en nuestro idioma todos esos trabajos –casi desconocidos todavía– que permanecieron ocultos hasta su muerte, y que subrayaban ya la genialidad del autor francés. Pero, como no podía ser de otra forma, se incluye también –en la exquisita edición de Mauro Armiño, dos veces Premio Nacional de Traducción– el último de sus libros, Tres cuentos (1877), hito del género compuesto por los clásicos «Herodías», «La leyenda de san Julián el Hospitalario» y, por supuesto, esa obra maestra titulada «Un corazón simple». Desde ahora Flaubert no solo es Madame Bovary, sino también cada uno de los cuentos que integran esta propuesta imprescindible.
Pídeme lo que quieras
Tras la muerte de su padre, el empresario Eric Zimmerman viaja a España para supervisar las delegaciones de la empresa Müller. En Madrid conoce a Judith, una joven ingeniosa de la que se encapricha. Judith acepta formar parte de sus juegos sexuales. Pero la relación se intensifica y Eric teme que se descubra su secreto, algo que podría marcar el principio o el fin de la relación.
Pídeme lo que quieras, ahora y siempre
Después de provocar su despido, Judith decide alejarse de Eric. Para ello se refugia en casa de su padre. Él le sigue el rastro. Las fantasías sexuales están muy vivas, pero esta vez Judith impondrá sus condiciones. Todo vuelve a la normalidad, hasta que una llamada los envía a Múnich. Lejos de todo, y con la aparición del sobrino de Eric, tendrá que decidir si darle una nueva oportunidad.
Pídeme lo que quieras o déjame
Judith y Eric regresan de su viaje tras una boda de ensueño. Él es el hombre más feliz del mundo y no se imagina su vida sin ella; pero, los celos y el afán de protección de él los enfrentan. Judith está encantada con su Iceman particular, aunque se llene el cuello de ronchones. Disfruta de sus juegos sexuales, excepto cuando le susurra que uno de sus mayores deseos es tener un hijo.
Pídeme lo que quieras y yo te lo daré
Eric Zimmerman y Judith Flores siguen tan enamorados como el primer día. Juntos han formado una preciosa familia. Björn y Mel continúan con su historia de amor junto a la pinsesa Sami. Aunque Björn no consigue que Mel se case con él. Ambas parejas se quieren y se respetan, hasta que de repente personas y sorpresas del pasado irrumpen en sus vidas y lo ponen todo patas arriba.
La narrativa breve de Zweig es un símbolo de la literatura y la cultura europea del siglo XX. Persiguiendo un anhelo de profundizar en lo oscuro, lo pasional, lo heroico o lo trágico, Zweig contruye bajo el influjo del psicoanálisis una red de personajes que conviven con un conflicto consigo mismos y con los demás y, por lo tanto, con las raices, las encrucijadas y la destrucción a la que se abocó la Eruopa de la primera mitad del siglo XX. Joyas como “Novela de ajedrez”, “Mendel el de los libros” o “Sueños olvidados” son solo la punta de una catedral literaria indispensable en Europa y que forma una mirada desgarradora poblada de relatos únicos.
PREMIO NOBEL DE LITERATURA EDICIÓN CONMEMORATIVA 20 AÑOS DE KAILAS EDITORIAL
«Uno de los premios Nobel mejor concedidos y merecidos», J. M. Guelbenzu, El País
Escritos entre 1873 y 1875 -en especial durante las dos estancias de Arthur Rimbaud en Londres, primero con Paul Verlaine y un año después con el joven poeta German Nouveau-, los poemas en prosa de Iluminaciones son el corolario de una obra que sigue deslumbrando e interpelando a los lectores por su onirismo, su radicalidad profética y su gusto precoz por el desmarque la ironía disolvente. Rimbaud entregó el manuscrito de estas 'illuminations' (la palabra inglesa para 'grabados coloreados') a Verlaine en febrero de 1875, durante uno de sus últimos encuentros, pero el libro no vio la luz hasta octubre de 1886 en las publicaciones de la revista La Vogue. El poeta, establecido a comienzos de esa década en Harar (Etiopía) como comerciante de café y armas de segunda mano y alejado completamente de su pasado literario por voluntad propia, no llegó a enterarse de esta publicación ni del impacto que tuvo en la poesía francesa de su tiempo.