«No sé si se puede vivir para uno mismo. Tal vez no sea posible, aunque lo intentes toda la vida, aunque te destierres una y otra vez, aunque te confines en tu propio mundo lo más apartado posible del resto de la humanidad».
Le llaman Escolta. Arrastrando la marca de Caín y con el corazón destrozado, se instala en una cabaña a las afueras de un pueblo de montaña. Su intención es dejarse llevar, mansamente, hasta el final de sus días. En un proceso de autodestrucción controlada comienza a usar como combustible los libros que siempre le habían servido de compañía, y con ello enciende una voz que grita toda la rabia, la soledad y el desconsuelo posibles.
Este es su diario: unos cuadernos escritos a lo largo de unos meses en los que va apuntalando a sus fantasmas en una pira y prendiéndoles fuego para no abandonarlos al futuro, pero sobre todo es la crónica de una sanación, de una búsqueda instintiva de la felicidad.
La última cabaña es una historia cruda y desnuda en su sinceridad, narrada por una voz de fuerza arrolladora.
«La tierra que llaman Celama nos hizo hijos del mismo destino en una noche de invierno.»
Este libro se compone de treinta y ocho historias que transcurren en el territorio imaginario de Celama. La mayoría forman parte de la trilogía compuesta por las novelas El espíritu del páramo, La ruina del cielo y El oscurecer, y otras son inéditas. Todas ellas se revisten ahora de un nuevo fulgor al aparecer reordenadas por la afinidad de lo que cuentan. Celama es una metáfora, tan hermosa como compleja, de la desaparición de las culturas rurales y conduce a lo más hondo y misterioso del corazón humano. Las historias nos ofrecen un cómputo de vidas apasionadas, melancólicas, exuberantes, cotidianas o secretas: un reflejo universal de las condiciones adversas de la vida, al que no falta la lucidez que añade el humor.
Imagina que hay otra España desde el golpe del 23-F. Y que vivimos en una dictadura militar.
Imagina que te llamas Libertad Guerra y eres periodista en el diario Pueblo, en Madrid. Que tu padre fue un poeta rojo y que en Lerma, vuestro pueblo, acosan a tu madre. Imagina que, mientras agoniza la movida de los 80, te enrollas con Imanol, un joven actor vasco. Y que la policía lo detiene y desaparece. Imagina que un flechazo te ha perforado. Y que tienes que encontrar a Imanol como sea.
Una novela epistolar sobre el final del amor y sobre cómo nuestra cotidianidad puede cambiar en un instante.
Agneta y Emma son dos hermanas que han crecido bajo la atenta mirada de una madre autoritaria que las ha conducido a buscar respuestas y afecto fuera del hogar. El reciente divorcio de Agneta y la reclusión de Emma en casa de su abuela hará que se cuestionen el papel crucial que las relaciones tienen en sus vidas y cómo la ruptura de estos vínculos puede cambiarlo todo en un instante, llevándolas a conocerse y a descubrirse a sí mismas.
Una novela íntima y delicada sobre la necesidad de pertenencia y sobre cómo nos definen los lazos que tejemos a lo largo de la vida.
Julio Cortázar merodea en los poemarios y cartas de John Keats y traza un retrato entrañable del poeta. Este itinerario multifacético tiene otros invitados, poetas y críticos literarios que los acompañan en el recorrido. El trabajo minucioso sobre la obra del poeta romántico lleva al autor a un diálogo en el que John Keats se pregunta por la tarea poética y la vida, y Cortázar responde extrayendo una verdad que hace propia a su tiempo.
La pluma de Cortázar dibuja así una Imagen de John Keats que no es una biografía, ni es un ensayo, pero que sí podría ser el diario de ese encuentro imaginario. La distancia de dos siglos que los separan se disuelve en este espacio íntimo que crea (Cortázar) como homenaje para John Keats.
La canción es infinita una vez que todas las madres del mundo se ponen a cantarla. No hay rimas suficientes...
Hay familias cuya historia es, en cierto sentido, la de todo un país. O la de un siglo entero. Esto ocurre con la de los Vias desde los últimos años de las colonias americanas hasta finales del XX, atravesando la España finisecular y el declive del imperio, pero también la guerra del Rif, la República, la guerra civil y sus consecuencias, la dura posguerra, el desarrollismo de los sesenta... Esta novela se asienta sobre la memoria de la autora: son sus recuerdos y también los relatos que se contaban en su casa, los que siguen narrando para siempre, al oído, atropellándose en ocasiones, todas aquellas voces de otra época.
Un hilo invisible une tiempos, lugares y personajes enLa voz de entonces, la historia de varias generaciones de Vias marcadas por sus mujeres, las madres que, con su fuerza irreductible, alumbraron a la familia para llegar hasta los albores del siglo XXI.