Imagina: eres un tiburón de las finanzas estilo lobo de Wall Street, perteneces a una buena familia y siempre lo has tenido todo; por no hablar de que no hay chica que se te resista. Y cuando estás a punto de rozar la cumbre del éxito con las yemas de los dedos, lo pierdes todo... por tu culpa. Tu única salida es volver a empezar y ahí estás, con tu traje esnob, en un polígono industrial en tu primer día como ceniciento. Pero, tranquilo, Alejo, que este no es el cuento de siempre, ¿o tal vez sí?
Después de vender más de 4.500.000 ejemplares de sus obras Elísabet Benavent despliega en Esnob su virtuosismo narrativo para hablarnos de las relaciones de amor en un mundo frenético donde lo habitual es encontrar a la persona a golpe de match. Esnob es una radiografía de las relaciones humanas mordaz e irónica, divertida y tierna, porque en este cuento lo de menos es el final.
Imagina: eres un tiburón de las finanzas estilo lobo de Wall Street, perteneces a una buena familia y siempre lo has tenido todo; por no hablar de que no hay chica que se te resista. Y cuando estás a punto de rozar la cumbre del éxito con las yemas de los dedos, lo pierdes todo... por tu culpa. Tu única salida es volver a empezar y ahí estás, con tu traje esnob, en un polígono industrial en tu primer día como ceniciento. Pero, tranquilo, Alejo, que este no es el cuento de siempre, ¿o tal vez sí?
Después de vender más de 4.500.000 ejemplares de sus obras Elísabet Benavent despliega en Esnob su virtuosismo narrativo para hablarnos de las relaciones de amor en un mundo frenético donde lo habitual es encontrar a la persona a golpe de match. Esnob es una radiografía de las relaciones humanas mordaz e irónica, divertida y tierna, porque en este cuento lo de menos es el final.
Espejo Viejo es el título de este libro que nos propone 21 Miguel Ángel Medina Fernández, como parte de ese “manojo de experiencias”, que es su octogenaria vida; y al leerlo, resulta imposible no retener algo que podamos usar a nuestro favor, o bien ajustarlo a nuestra propia realidad, Cada composición emerge en un ambiente donde confluyen la humanidad y la naturaleza, para formar una asociación donde la una toma ejemplo de la otra, El amor a la Patria, a sus héroes y símbolos, a la familia, los hijos, la mujer, la tierra y cada ser que acompaña este viaje que significa la existencia. Miguel Ángel Medina ofrece con sencillez y belleza una imagen que no miente y que se vuelve cada vez más cercana e infinita.
Cuando en 1953 se estrenó en París Esperando a Godot, pocos sabían quién era Samuel Beckett, salvo, quizá, los que ya lo conocían como exsecretario de otro irlandés no menos genial: James Joyce. Por aquellas fechas, Beckett tenía escrita ya gran parte de su obra literaria; sin embargo, para muchos pasó a ser «el autor de Esperando a Godot». Se dice que, desde aquella primera puesta en escena -que causó estupefacción y obtuvo tanto éxito- hasta nuestros días, no ha habido año en que, en algún lugar del planeta, no se haya representado Esperando a Godot. El propio Beckett comentó en cierta ocasión, poco después de recibir el Premio Novel de Literatura en 1969, que Esperando a Godot era una obra «horriblemente cómica». Sí, todo lo horriblemente cómica que puede resultar la situación de dos seres cuya grotesca vida se funda en la vana espera de ese ser al que llaman Godot.
Esperando a los bárbaros es una novela de clara intención moral: una parábola de una Sudáfrica desquiciada por el racismo, una denuncia de la brutalidad y de la arrogante ignorancia del poder. Por el Premio Nobel de Literatura J.M. Coetzee.
Un día el Imperio decidió que los bárbaros eran una amenaza para su integridad. Primero llegaron al pueblo fronterizo policías, que detuvieron sobre todo a quienes no eran bárbaros pero sí diferentes. Torturaron y asesinaron. Después llegaron los militares. Muchos. Preparados para realizar heroicas campañas militares.
El viejo magistrado del lugar trató de hacerles ver con sensatez que los bárbaros habían estado desde siempre allí y nunca habían sido un peligro, que eran nómadas y no se les podía vencer en batallas campales, que las opiniones que tenían sobre ellos eran absurdas... Vano intento. El magistrado solo logró la prisión y el pueblo, que había aclamado a los militares cuando llegaron, su ruina.
Entre los años 1968 y 1969, el asesino al que la prensa bautizaría como John Biblia mató a tres mujeres en Glasgow. Nunca fue identificado y el caso todavía sigue abierto hoy en día. En esta novela, a principios de los años ochenta, el investigador de policía escocés Noah Scott Sherrington logra llegar hasta John Biblia, pero un fallo en su corazón en el último momento le impide arrestarlo. A pesar de su frágil estado de salud, y contra los consejos médicos y la negativa de sus superiores para que continúe con la persecución del asesino en serie, Noah sigue una corazonada que lo llevará hasta el Bilbao de 1983. Justo unos días antes de que un verdadero diluvio arrase la ciudad.
Dolores Redondo se autodefine como «una escritora de tormentas» y con esta nueva novela, basada en hechos reales, nos conduce hasta el epicentro de una de las mayores tormentas del siglo pasado a la vez que retrata una época en plena ebullición política y social. Es un homenaje a la cultura del trabajo lleno de nostalgia por un tiempo en el que la radio era una de las pocas ventanas abiertas al mundo y, sobre todo, a la música. Y es también un canto a la camaradería de las cuadrillas y a las historias de amor que nacen de un pálpito.