¿Por cuánto tiempo podemos mantener ocultos los secretos sin que nos pesen?
La noche del 22 de junio, mientras todo el elitista Instituto Magno celebra la fiesta de fin de curso, Blanca Roca, la profesora de literatura, es abatida de un disparo en la frente. A la mañana siguiente, unos bañistas encuentran su cadáver en la playa.
La muerte de Blanca sigue siendo una incógnita cuando, tres meses después, empieza el nuevo curso y Paula Arias llega como sustituta a un pueblo aún conmocionado por la tragedia. Enseguida conocerá a Nuno, profesor de matemáticas y propietario de la controvertida discoteca Faro, que no tardará en descubrir quién es realmente Paula y cuáles son los motivos que la han conducido hasta Llafranc.
Dos jóvenes unidas por el mismo destino, que emigran por amor y lealtad a la familia. Una isla exótica que oculta bajo su luz antiguos odios y venganzas.
Norte de España, 1895: dos mujeres abandonan la apacible villa de Colombres para viajar a la lejana isla de Cuba. Sus motivos no pueden ser más distintos.
Mar, la hija del médico del pueblo, emprende la travesía siguiendo a su padre, encargado de dirigir un consultorio en una plantación de azúcar llamada Dos Hermanos.
Paulina, viuda demasiado joven y de origen humilde, se ve obligada a embarcar para contraer matrimonio con el prestigioso maestro de azúcar de la hacienda, un hombre a quien no conoce.
El mago de Lublin se ha coronado con el tiempo como la novela más importante de la literatura yidis. Su protagonista, Yasha Mazur, un polaco medio judío y medio pagano, realiza actos de magia, acrobacia y escapismo a lo largo de la Polonia del este. Y mientras él va recorriendo los poblados, tendiendo entre la libertad y la amoralidad una simple soga que cruza cual equilibrista, su esposa, judía practicante, lo espera en casa sin creer en las habladurías que dan cuenta de la doble vida de Yasha. Pero no hay magia que resista el deterioro de la ilusión ni hombre al que no le toque la hora de luchar contra sí mismo.
El mago de Lublin es un extraordinario relato sobre la eterna, y casi siempre sinuosa, búsqueda de la divinidad.
Le llaman el hechicero, el mago del Kremlin. El enigmático Vadim Baranov es el consejero más cercano a Putin, aunque no sea un asesor al uso: culto y vinculado a la vanguardia artística, es también un manipulador sin escrúpulos capaz de transformar un país entero en un escenario teatral en el que solo se representa la voluntad del líder. Pero en las altas esferas un paso en falso a menudo es el último, y pronto descubre que el régimen que ha contribuido a construir puede dejarlo caer en cualquier momento.
Este relato ficticio nos sumerge en el corazón del poder ruso, en el que aduladores y oligarcas están involucrados en una guerra sin cuartel. Es una montaña rusa intelectual, antropológica y emocional que alumbra a un Maquiavelo moderno y desalmado, a la par que una meditación magnífica sobre la fascinación por el poder, el mal y la guerra.
Portnoy, mal de [llamado así por Alexander Portnoy (1933- )]: trastorno en el que los impulsos altruistas y morales se experimentan con mucha intensidad, pero se hallan en perpetua guerra con el deseo sexual más extremado y, en ocasiones, perverso.
Al respecto dice Spielvogel: «Abundan los actos de exhibicionismo, voyeurismo, fetichismo y autoerotismo, así como el coito oral; no obstante, y como consecuencia de la "moral" del paciente, ni la fantasía ni el acto resultan en una auténtica gratificación sexual, sino en otro tipo de sentimientos, que se imponen a todos los demás: la vergüenza y el temor al castigo,sobre todo en forma de castración» (Spielvogel, O., «El pene confuso», Internationale Zeitschrift für Psychoanalyse, vol. XXIV, p. 909). Spielvogel considera que estos síntomas pueden remontarse a los vínculos que hayan prevalecido en la relación madre-hijo.
Howard Roark es un arquitecto joven y osado. Es individualista, inconforme, y está dispuesto a enfrentarse al establishment de la vieja profesión, que rechaza las innovaciones y cuya única ambición es rendirse al gusto de las masas.
No le resultará fácil. Solo su entereza le permitirá salir adelante y encarar los deseos de los demás personajes: un arquitecto sin vocación, una amante que no cree en el triunfo de la rebeldía, un poderoso editor que sabe que su éxito depende del favor del público y un socialista que pretende dominar el mundo e imponerle una ética bondadosa. Deberá hacer frente a una sociedad que desprecia a los grandes creadores porque no encajan en sus esquemas estrechos.