El día que se abrió el cielo
Tunuva Melim es una de las hermanas del Priorato. Se ha pasado cincuenta años entrenando para combatir a los wyrms, pero no ha aparecido ninguno desde que vencieran al Innombrable, y las hermanas más jóvenes empiezan a cuestionarse el motivo de ser del Priorato.
Al norte, en el reino de Inys, Sabran la Ambiciosa se ha casado con el nuevo rey de Hróth, reconduciendo el destino de ambos reinos. Su hija, Gloria, la sigue fielmente, en la sombra, que es justo donde quiere estar.
Los dragones del Este llevan siglos dormidos. Dumai se ha pasado la vida en un templo en las montañas de Seiiki, intentando despertar a los dioses de su largo letargo. Pero de pronto aparece alguien del pasado de su madre para cambiar el rumbo de su destino.
Roma soy yo
Roma, año 77 a.C. El cruel senador Dolabela va a ser juzgado por corrupción, pero ha contratado a los mejores abogados, ha comprado al jurado y, además, es conocido por usar la violencia contra todos los que se enfrentan a él. Nadie se atreve a ser el fiscal, hasta que de pronto, contra todo pronóstico, un joven patricio de tan solo veintitrés años acepta llevar la acusación, defender al pueblo de Roma y desafiar el poder de las élites. El nombre del desconocido abogado es Cayo Julio César.
Maldita Roma
Mare Internum, año 75 a. C. Un barco mercante navega rumbo a la isla de Rodas. A bordo, Julio César acompañado sólo por su fiel Labieno. Obligado por sus enemigos a exiliarse de Roma, se dirige al encuentro con el maestro Apolonio para aprender oratoria y de este modo, a su regreso, iniciar una feroz pugna para ingresar en el Senado y enfrentarse allí al temido Cicerón.
Eva García Sáenz de Urturi irrumpió en el panorama de la novela negra cuando, en 2016, publicó El silencio de la ciudad blanca, primera entrega de la trilogía de la Ciudad Blanca. Pocas semanas después, arrancó un fenómeno sorprendente e imparable. La novela estaba fascinando a los lectores y la prensa anunció el nacimiento de un nuevo inspector: Unai López de Ayala, más conocido como Kraken. En este estuche el lector encontrará los tres ejemplares que conforman la trilogía: El silencio de la ciudad blanca, Los ritos del agua y Los señores del tiempo.
Elcastillo (Trilogía Medieval 1)
El rey Sancho III el Mayor decide levantar una fortificación en una recóndita sierra, poco poblada y desde la que se podía avistar al enemigo musulmán a diez kilómetros de distancia. Y con la promesa de un futuro mejor, atrajo a un grupo de hombres y mujeres para quienes la supervivencia era una heroicidad cotidiana, y quienes, con sus escasos medios y conocimientos, lograron superar las limitaciones que les imponían la ignorancia y el poder hasta culminar la fortaleza religiosa y militar desde la que se gestó uno de los más importantes reinos medievales, clave de la Reconquista.
La ciudad (Trilogía Medieval 2)
Año 1284. Cae la noche en una de las ciudades medievales más bellas del mundo. ¿Te atreves a caminar por sus estrechas calles, por sus empinadas cuestas y sus asombrosos rincones? Empieza a oscurecer. Sientes frío. Escuchas los rumores acerca de las inexplicables muertes que se están sucediendo. De los secretos que esconden los gremios. De la peligrosa mujer encerrada en las mazmorras...
El monasterio (Trilogía Medieval 3)
En el siglo XIV el monasterio de Santa María de Veruela es escenario de una cruenta guerra entre las coronas de Castilla y Aragón. Hasta allí llega Bizén con una misión: recuperar los restos que yacen en una de sus tumbas, algo a lo que el abad se niega. Pero cuando uno de los hermanos de la abadía aparece misteriosamente asesinado, Bizén se verá implicado en una muy peligrosa intriga..., porque si no encuentra al culpable, su propio secreto será descubierto.
Una habitación propia.
Texto señero del feminismo del siglo XX, basado en dos conferencias impartidas por Virginia Woolf en Cambridge, Una habitación propia indaga con singular ironía y talento narrativo en los graves efectos que tuvo la discriminación de género en la creatividad de las mujeres a lo largo de la historia, al tiempo que propone un camino liberador a través de la independencia económica: para escribir novelas, una mujer debe tener dinero y un espacio propio.
La señora Dalloway.
La señora Dalloway relata un día en la vida londinense de Clarissa, una dama de alta alcurnia casada con un diputado conservador y madre de una adolescente.
La historia comienza una soleada mañana de 1923 y termina esa misma noche, cuando empiezan a retirarse los invitados de una fiesta que se celebra en la mansión de los Dalloway. Aunque en el curso del día acaece un hecho trágico -el suicidio de un joven que volvió de la guerra psíquicamente perturbado-, lo esencial de la obra estriba en que los sucesos están narrados desde la mente de los personajes, con un lenguaje capaz de dibujar los meandros y ritmos escurridizos de la conciencia y de expresar la condición de la mujer de un modo a la vez íntimo y objetivo.