En 2018, la escritora y poeta estadounidense Maggie Smith, casada y madre de dos hijos, descubre que su marido tiene una relación con otra mujer. En cuestión de días, la realidad que había construido durante más de veinte años se derrumba y da paso a un dolor que convertirá, a través de la escritura, en un renovado compromiso consigo misma.
A base de pequeñas viñetas, pieza a pieza, Smith traza una reflexión llena de empatía y humor sobre la desintegración de un matrimonio que es también un ajuste de cuentas con la feminidad contemporánea, los roles tradicionales de género y las dinámicas de poder que persisten incluso en las parejas más modernas. Página a página, estos fragmentos terminan erigiéndose en un interrogatorio a la familia, el trabajo y el amor.
Quien escribe un poema lo escribe, antes que nada, porque el poema es un colosal acelerador de la conciencia, del pensamiento, de la percepción del mundo». Del discurso de Joseph Brodsky al recibir el Premio Nobel de LiteraturaA caballo entre dos lenguas durante décadas, el bilingüismo de Brodsky no solo revitaliza con singular desenvoltura un lenguaje heredado, sino que también proyecta una radical y profunda exploración de sus metros e imágenes, elevada a una forma particular de metafísica. Sin embargo, Brodsky es también un poeta eminentemente físico, cuyo tema fundamental es la encrucijada entre el espacio, el tiempo y los sentidos. Ningún otro escritor contemporáneo habla tanto de la intemperie. Sus musas no son Calíope ni Tersícore, ni sus artísticas hermanas asociadas con emociones y sentidos, sino Urania, musa de la astronomía, «más vieja que Clío», matrona del conocimiento estelar, del espacio puro, de esas extensiones heladas en medio de las cuales el hombre parece el derrubio lodoso que arrastra un glaciar.
Junto con Garcilaso de la Vega y Juan Boscán, podría decirse que Diego Hurtado de Mendoza compuso el trío de autores que inauguró la nómina de los grandes poetas de los Siglos de Oro. Esta nueva edición actualizada ofrece su poesía completa, si bien cuidando de limitar la selección a aquellas obras que, sin duda alguna, pertenecen al poeta granadino, a quien en el pasado se ha atribuido un buen número de composiciones de autoría incierta o muy difícil de probar. Además, se ha optado por acompañar los textos de un aparato crítico completo, así como por conferirles una nueva ordenación por géneros (sonetos, octavas, etc.) con la intención de facilitar el acceso a la obra de Mendoza a sus nuevos lectores.
Maresía presenta la segunda antología de poesía
bonita y que se entiende, una selección de poemas
de dieciséis autores con una gran proyección en el
panorama poético actual: José María Castellano
Martínez, Malena Ulcina Cabello, Amanda Plaza,
Míriam de los Ríos, Álvaro Macías Rondán, Aurora H.
Camero, Andrés Rubio Blanco, Cris Rivero, Paula
Sánchez Santiago, Obed Higueras, Javier Vayá
Albert, Jesús Durán, Pablo R. Carratalá, Berta
Algaba, María José Coronado e Ismael Rodríguez
Lara. Junto a estos, se incluyen otros textos poéticos
de Francisco Padilla Chacón y José Fernández del
Cacho. Alentados por el éxito de la primera
antología, mantenemos el sistema de acompañar
cada poema con un comentario de su autor y una
explicación del editor que justifica la elección.
Poesía bonita y que se entiende 2. Nueva antología
comentada de poesía actual continúa la línea de
Maresía de acercar la poesía a todos.
Desde su primera entrega, Mariposa en cenizas (1959), la poesía de Julia Uceda ha seguido un itinerario muy personal que pese a compartir algunos aspectos en común con sus coetáneos, los autores del medio siglo, ha ido acuñando una poética única, explorada desde antiguo pero cada vez más profunda y ambiciosa, que brilla con especial intensidad en sus últimos libros: Zona desconocida (2006), Hablando con un haya (2010) y Escritos en la corteza de los árboles (2013). Prologada por el principal responsable de su rescate editorial en los inicios de este siglo, su antiguo alumno y gran amigo el poeta y director de Vandalia Jacobo Cortines, esta Poesía completa reúne en un solo volumen todos los libros de una autora para quien la poesía es un ámbito misterioso que nos conecta con los territorios de lo inefable. Sin desatender la circunstancia histórica, la voz de Julia Uceda, su mirada interior, dialogan con presencias invisibles, viajan al pasado remoto o indagan en los aspectos más inquietantes de la realidad, con una dicción poderosa que se estructura en varios niveles de significado. Desde el afán de conocimiento, desde un sentimiento de radical extrañeza, Julia Uceda ha escrito una de las obras más sólidas de su generación y de la poesía española contemporánea.
Blanca Varela (Lima, 1926-2009) es una de las voces poéticas más destacadas de América Latina. Ha publicado Ese puerto existe (1959), Luz de día (1963), Valses y otras falsas confesiones (1972), Canto villano (1978), Ejercicios materiales (1993), El libro de barro (1993), Concierto animal (1999) y El falso teclado (2001), todos ellos incluidos en este volumen junto con una serie de poemas dispersos. Por su obra obtuvo el Premio Internacional de Poesía Federico García Lorca (2006) y el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (2007). «Blanca Varela es una poeta que no se complace en sus hallazgos ni se embriaga con su canto. Con el instinto del verdadero poeta, sabe callarse a tiempo. Su poesía no explica ni razona.
Se ofrece en este volumen la poesía completa de rosalía de castro. sus cinco libros: la flor (1857), a mi madre (1863), cantares gallegos (1863), follas novas (1880) y en las orillas del sar (1884), más un apéndice con poemas sueltos, así como algunas canciones y poemas populares recogidos por la escritora, se reúnen aquí en un único volumen, en edición bilingüe a cargo de juan barja (traducción y notas) y con una introducción de arturo leyte. como señala el traductor, para la edición castellana «se ha optado por una versión rítmica y rimada, siguiendo los modelos originales tal como seguramente hubiera preferido rosalía, mas tratando de guardar al máximo la semejanza, aun a riesgo de afear el resultado, sustituyendo, supliendo, variando en contadísimas ocasiones lo que dice? el poeta, para respetar mejor lo que el poeta canta. además, siendo esta edición bilingüe como quizá siempre deberían ser, al menos, las de todas las traducciones de libros de poesía, la insuficiencia de mis logros queda más que favorablemente saldada y corregida. la versión castellana es así el trampolín donde se podrán apoyar los que no alcancen a desenvolverse directa o enteramente en gallego. y con esto basta».
Este es un libro largamente esperado: la poesía completa de una de las autoras más deslumbrantes y admiradas de la literatura reciente. Es también la constatación de un corpus que adquiere toda su coherencia leído desde sus primeras etapas, y consolidado en los títulos que ha asentado su prestigio. Aquí se encuentran, estructurados en tres partes («No pondrás nombre al fuego», «Lo que el pájaro bebe en la fuente y nos es agua» y «Fuera de obra») sus poemas radicales inspirados en las culturas orientales, las fronteras porosas de su poética con la filosofía, y los libros inapelables que plantean la relectura de los mitos y los grandes referentes clásicos, además de sus brillantes exploraciones de las formas caligramáticas, sus interacciones con la pintura, sus nuevas propuestas de poemas dramáticos. Una poesía total que sólo puede apreciarse en un volumen como este.
Samuel Taylor Coleridge (1772-1834) pertenece a la primera generación de los poetas románticos ingleses, junto con su amigo William Wordsworth. Ambos se dieron a conocer con las célebres "Baladas líricas" (1789), donde ya se señalaban diferencias entre ellos: el uso del lenguaje coloquial en Wordsworth y la primacía de la imaginación en Coleridge. Esta edición ofrece por primera vez al lector de habla española la poesía completa de Coleridge. Del más conocido al más insólito, este libro reúne los diversos poetas que fue el autor: aquí hallaremos al Coleridge visionario (el de, por ejemplo, "Kubla Khan") junto al menos conocido de las "circunstancias trascendidas", irónico y cercano. En suma, como el mismo poeta expresó: "Con mis escritos no perseguí la gloria ni ningún beneficio.