Durante el verano de 1891, el joven doctor Shimamura es enviado a una expedición al remoto interior de Japón. Han llegado informes a Kioto que hablan de poblados perdidos en las montañas en los que ciertas mujeres han sido poseídas presuntamente por espíritus de zorros. Al principio, Shimamura se muestra escéptico, hasta que conoce a Kiyo, una «belleza floreciente» cuyos síntomas (aullidos, retorcimientos, y una forma zorruna deslizándose sinuosamente bajo su piel) se ajustan más al folclore que a cualquier diagnóstico recogido en los libros de texto. Sin embargo, al médico le sucede algo transformador: a partir de ese momento, sufre una fiebre crónica y las mujeres se sienten atraídas hacia él como polillas a la llama. Enviado a Europa por el gobierno japonés, armado con una carpeta de grabados pornográficos en caso de que necesite «jugar la carta oriental», Shimamura conocerá a los apóstoles de la psiquiatría moderna: Charcot, Tourette, Binet, Breuer, Freud. Y tratará de que la ciencia exorcice las preguntas persistentes planteadas por «la princesa zorro de Shimane».
EthelBrun es hija de un matrimonio de exiliados, el formado por Justine y Alexandre, un hombreapuesto e inquieto que dejómuyjovenla islaMauricio y que, en el alegre París de los añosveinte y treinta, se dedica a dilapidar suherencia en negociospocorecomendables. En suinfancia, Ethelsólodisfrutadurantesuspaseos por la ciudad con sutíoabuelo, el excéntricoSamuelSoliman, que sueña con vivir en el pabellónde la India francesa construido para la Exposición Colonial. Ya en la adolescencia, Ethelconoceráalgoparecido a la amistad de la mano de Xenia, una compañera de colegio, víctima de la Revoluciónrusa y que vive casi en la pobreza. Laexistencia de Ethelempieza a tambalearsecuando, en las comidas que supadreofrece a parientes y conocidos, se repite cada vezmás a menudo el nombre de Hitler. Serán las primerasseñales de lo que amenaza a la familiaBrun: la ruina, la guerra, pero, sobre todo, el hambre. Esomarcará el despertar de la jovenEthel al dolor y al vacío, perotambién al amor, en una novela en torno a los orígenesperdidos, durante una época que culminó con un Apocalipsis anunciado.
Nápoles, 1900. Fabio, el dueño del teatro Dellanotte, parte de viaje por un año, y encarga a sus dos hijos: Adriano, violonchelista ciego, y Carlo, la responsabilidad de regentar el teatro de la ópera. Pero tras su partida, todo va a cambiar. Sus hijos, aunque Carlo está casado, se enamoran de la misma misteriosa mujer. Su esposa desarrolla aficiones que no imaginaría. Y un sanguinario asesino en serie se dedica a matar en el teatro, siguiendo las pautas de un antiguo manuscrito que narra la vida de Diane, la criada muda de la envenenadora marquesa de Brinvilliers, en el París del Rey Sol. Para atraparlo, recibirán la ayuda de Gianni Leone, colaborador del fundador de la escuela italiana de antropología criminal Abele de Blasio. Se valdrá de sus nuevos, pero aún no probados, métodos científicos, para lograrlo… ¿o no?
"Un mismo principio puede curar o matar, que no es otra cosa que sanar de la vida".
Es víspera de Navidad y la visita de la clase de Joséphine al zoo ha sido una catástrofe. Nadie sabe qué ha pasado exactamente y los padres de la niña están dispuestos a descubrirlo. Mientras la investigación avanza, comprendemos poco a poco que una catástrofe nunca llega sola, que las apariencias engañan y que los acontecimientos pueden tomar un giro que nadie imagina.
La muy catastrófica visita al zoo nos mantiene en vilo hasta el final; es una novela divertida y emocionante, repleta de guiños sobre nuestra sociedad, sobre la democracia, la educación inclusiva, el rol de los padres y de los maestros.
Al quinceañero Alex le gustan los latigazos de ultraviolencia. Junto a su pandilla de amigos, roban, matan y violan en un futuro de pesadilla, hasta que el Estado pone fin a sus desmanes. Pero ¿qué significará para él su reeducación?
La naranja mecánica es un horror distópico, una comedia negra, una exploración de la capacidad de elección, pero también es una obra llena de invención donde se creó un nuevo lenguaje para sus personajes
En esta mirada satírica y perturbadora sobre los jóvenes en plena rebelión, Alex y sus amigos de quince años emprenden una orgía diabólica de robos, violaciones, torturas y asesinatos. Hasta que Alex es apresado por sus actos delictivos y el Estado intenta reformarlo. Pero ¿a qué precio?
¿Se trata de una profecía social? ¿De humor negro? ¿De un estudio sobre los espíritus libres? La naranja mecánica es una suma de todo ello, y también incluye un brillante experimento con el lenguaje, por el que Burgess crea una jerga adolescente, el «nadsat».
«Un libro terrible y maravilloso.» Roald Dahl
«Una de las novelas más rompedoras e influyentes de todos los tiempos, y una de las mejores.» Irvine Welsh