El duelo es un territorio oscuro, misterioso, casi inaccesible. Una conmoción que nos sorprende, nos toma desprevenidos y cambia nuestro mundo en un instante. No importa lo preparados que creamos estar para enfrentar una pérdida, esa preparación jamás será suficiente. Cuando eso ocurre, todo se desmorona y por un tiempo nada tiene sentido. algo se quiebra en nosotros, el mundo se derrumba y nos muestra su aspecto más cruel».
Con estas palabras describe Gabriel Rolón cuál será el camino que va a transitar en su nuevo ensayo: la pérdida. Sí, la muerte, sin rodeos (la propia y la de los que amamos), pero también la falta imprevista (o no tanto) de todo aquello que nos sostiene anclados a la vida.
En esta obra póstuma e inédita, Nélida Piñon -Premio Príncipe de Asturias de las Letras y la primera mujer que llegó a presidir la Academia Brasileña de las Letras-, cose su testamento literario y lo convierte en una celebración de la vida donde relata su pasión por la creación, ahonda en el sentido de pertenencia a un territorio y canta su amor a la música y al arte entretejiendo episodios e recuerdos sobre sus amigos más íntimos: Gabriel García Márquez, Mario Vargas Llosa, Susan Sontag o Clarice Lispector. Introduciendo retazos de su infancia, en la que las lenguas española y portuguesa se entrelazaron, y creando una sinfonía cultural que resuena en su vida y en su literatura, Piñon acompaña el lector por una profunda reflexión sobre la mortalidad y el poder de la invención a través de las palabras.
La sociedad en la que vivimos nos aleja de la muerte, de las personas que están muriendo, y nos obliga a perder momentos mágicos y únicos que llenan de sentido la vida.
En los años que Xusa Serra ha ejercido de enfermera de paliativos ha tenido el privilegio de acompañar a cientos de personas en sus últimos minutos, y tambien a sus familias, y ha podido vivir en sus carnes momentos especiales que son lecciones de vida.
Entre estas páginas, descubriremos cómo la muerte nos enseña a vivir con plenitud, pasión y propósito. Conoceremos situaciones inexplicables pero reales, circunstancias que nos harán dudar de todo aquello que hemos aprendido y que nos abrirán la mente y el corazón. Un viaje que nos ayuda a entender de forma cercana y con mucha tranquilidad el proceso de morir, el acto de despedirse y a construir el camino del duelo para incorporar la muerte de un ser querido desde el amor y la calma.