Las 120 jornadas de Sodoma es la primera novela de la estremecedora obra narrativa del marqués de Sade. La escribió, según su propio testimonio en 1785 durante treinta y siete noches, cuando estaba prisionero en la Bastilla. Narra la historia de cuatro libertinos que deciden dedicar ciento veinte jornadas a los más inimaginables y tortuosos excesos sexuales, para lo cual redactan un código que ordenará el gran desorden carnal de cada una de sus largas sesiones de desenfreno.
Pronto cobró fama de libertino, término muy usado en esos tiempos sedientos de libertad para designar a quien hacia un mal uso de ella, esto es, a quien se entregaba a sus deseos más extravagantes y singulares principalmente en el terreno de la sensualidad y de la sexualidad
Un joven barón austriaco llega a un lujoso hotel-balneario para disfrutar de una semana de vacaciones. Allí conoce a una dama a la que se propone seducir. Para lograr su objetivo, decide utilizar como intermediario a su hijo enfermizo de doce años. Empieza entonces una intensa relación triangular que avivará una conciencia en el pequeño que cambiará para siempre la relación con su madre. Un magistral relato con la moralidad, las debilidades humanas y el paso de la niñez a la adolescencia como telón de fondo.
Roland, profesor universitario con treinta años de carrera, recibe de sus discípulos y compañeros de facultad como regalo por su sesenta cumpleaños un libro homenaje con los momentos más importantes de su trayectoria profesional. Pero el libro está incompleto. Nadie sabe de la persona que le inspiró en sus estudios y que cambió su modo de ver la vida. Este es el relato de su secreto mejor guardado. En Confusión de sentimientos Stefan Zweig explora desde un nuevo ángulo las pasiones y contradicciones humanas y teje una narrativa magistral sustentada en su elegante estilo y precisión.