NOVEDADES

Ver como
Ordenar por
Mostrar por página
Imagen de LA ESCLAVITUD DE NUESTRO TIEMPO
850

LA ESCLAVITUD DE NUESTRO TIEMPO

La esclavitud de nuestro tiempo surgió cuando Lev Tolstói se enteró por un conocido de que los cargadores de la línea de ferrocarril Moscú-Kazán trabajaban por norma unas treinta y seis horas seguidas, así que quiso ir a hablar con ellos y a comprobar con sus propios ojos esas condiciones miserables. Entonces llevaba ya más de dos décadas reflexionando sobre la violencia organizada del Estado y de la propiedad privada, y había abrazado un ideal anarquista de inspiración evangélica orientado, precisamente, a la no violencia. Para preparar este corto ensayo, que vio la luz en 1900, Tolstói escribió más de mil ochocientas páginas a mano, prueba de que lo consideró su gran aportación a la causa de la libertad, la justicia y la felicidad humanas. Traducción de Esther Gómez Parro
850
Imagen de SI SALIERAS A VIVIR (LIMITED) (BOL)
650

SI SALIERAS A VIVIR (LIMITED) (BOL)

La vida no es perfecta, pero tu actitud sí puede serlo. Superarte, cambiar o plantearte metas es algo que deber elegir tú. E, independientemente del momento en el que te encuentres y de las circunstancias por las que atravieses, siempre tienes la libertad de elegir cómo enfrentarte a cada situación. Porque la actitud no lo es todo, pero sí es el motor para alcanzar tus deseos. Y en el mundo hay actitud para todos, y en grandes cantidades. Sal a luchar por la ración que te toca.
650
Imagen de CARTAS A VINCENT (ILUSTRADO)(ZORRO)
1,350

CARTAS A VINCENT (ILUSTRADO)(ZORRO)

Theo Van Gogh es un hombre «sin talento» que cifra su existencia en el amor que profesa al arte y a su hermano Vincent, el artista de la familia, a quien envía dinero y cartas llenas de melancolía. Esta correspondencia hasta ahora inédita, rigurosamente inventada por Julio César Pérez, juega de manera especular con las cartas reales de Vincent a Theo, se interrumpe poco antes de la muerte de ambos y no recoge ninguno de los acontecimientos que marcaron la vida del «loco pelirrojo». Habla, más bien, de las esperanzas y los miedos del menos conocido de los hermanos, del París de los impresionistas, del sentido profundo del arte. En estas páginas hay sombra, hay muerte y tragedia, pero por encima de todo está la búsqueda, a veces infructuosa, de la belleza. Eso que Julio César Pérez persigue con una libertad insolente.
1,350