Una tragicomedia irlandesa tan hilarante como desgarradora.
Les presentamos a los Barnes, una familia irlandesa infeliz de cuatro maneras diferentes.
El padre, Dickie, regenta un concesionario de coches heredado de su progenitor. Las cosas le iban razonablemente bien hasta que la crisis económica (y quizá también su heterodoxa labia de vendedor) empezó a afectar a las ventas. La madre, Imelda, viene de una familia humilde y es conocida por ser la mujer más hermosa del pueblo. En realidad, ella estaba enamorada de Frank, el hermano carismático —y fallecido— de Dickie, y ahora ambos arrastran un pasado con zonas oscuras.
En cuanto a los hijos: Cass es una adolescente en pleno descubrimiento del sexo y el alcohol que sueña con dejar esa maldita ciudad provinciana y marcharse a estudiar a Dublín. Mientras, mantiene una relación ambivalente, de devoción rabiosa, con su amiga del alma Elaine. Y el benjamín, PJ, sufre acoso en el colegio y teme que sus padres se divorcien, por lo que se refugia en los videojuegos. Allí conecta con un amigo virtual que puede no ser lo que parece...
A Paedyn y a Kai vuelve a separarles una realidad que se impone a sus deseos, y deberán enfrentarse a una terrible decisión en esta emocionante conclusión de la exitosa trilogía romántica, perfecta para fans de Sarah J. Maas.
Fruto de más de medio siglo de dedicación a la poesía, este volumen reúne la obra en verso de Álvaro Salvador, uno de los autores más sólidos y coherentes de su generación. Editada e introducida por Gracia Morales, que recorre en su texto preliminar el itinerario y las claves de su poética, la recopilación incluye una selección de sus primeros libros y los ocho publicados entre Las cortezas del fruto (1980) y Un cielo sin salida (2020), a los que se añade el hasta ahora inédito Aguaparra, un poemario donde se conjugan magistralmente la más afilada actualidad con el ejercicio pausado de la memoria. Como escribió Ángel González, «la poesía de Álvaro Salvador no se limita a ser relato, inventario o recuento de la vida. En ella el recuento es más bien reencuentro, recapitulación –ordenación y valoración– de todas esas cosas, actividad imaginativa de la memoria que hace del inventario una invención equivalente a un descubrimiento.