Hablar de sanidad interior en el tiempo que estamos viviendo es un poco complicado debido a los muchos tabúes que existen principalmente en las iglesias con referente a estos temas, pero si por un momento pudiéramos sentarnos y analizarlo desde un punto de vista bíblico nos daremos cuenta de que para Dios es muy importante que estemos sanos para poder cumplir a plenitud con el propósito que Él tiene para nuestras vidas.
«Si algún poeta dominicano significa o representa la pasión en su más alto grado ese es Rafael Valera Benítez, aunque su obra poética no es amplia, pero sus poemas contienen una fuerza telúrica reveladora. Era un deslumbrante maestro del soneto y, cuando escribía versos libres, siempre versículos que recuerdan a Whitman o a Claudel, la musicalidad avasalladora de sus páginas es como un volcán ciego, río de lava quemante que fluye hasta reencontrarse y reconciliarse consigo mismo». —Radhamés Reyes Vásquez
La familia Poveda echó sus raíces al lado de la iglesia católica y le tocó ejercer su cristiandad en una de las épocas más oscura de la fe. A finales del siglo XVI y principio del XVII, la Santa Madre iglesia, necesitó
de su feligresía la disposición total de sus mejores líderes para que salieran por las colonias establecidas y por establecer a difundir la palabra de Dios y entre las escogidas, para encabezar la delegación, estuvieron María de los Remedios Poveda y su sobrina Gertrudis Poveda junto a su congregación. Estos misioneros no vendrían a la Isla como parte de un servicio a las
damas y cortesanas de los conquistadores, pues ya en
ese tiempo la colonia estaba interesada en una expansión más allá de la ciudadela establecida al lado izquierdo del estuario del Río Ozama.