¡Embárcate con Thomas Pesquet a bordo de la Estación Espacial Internacional! Descubre las misiones de los astronautas, su vida en el espacio y da una vuelta al mundo desde la Cupola, un extraordinario puesto de observación a más de 400 km de altitud. A través de impresionantes fotografías, Thomas Pesquet comparte su pasión por nuestro planeta azul y da a los jóvenes lectores las claves para entender los grandes desafíos medioambientales. Y es que es necesario comprender el cambio climático para combatirlo con mayor eficacia. «La Tierra es nuestro oasis. Hay que protegerla». Thomas Pesquet.
El koala Martín se despierta un día ¡y su chupete ya no está! Aunque no lo encuentra por ninguna parte, va a ir a la piscina, va a hacer la siesta... ¡e incluso va a jugar sin él! ¿Dónde se habrá metido?
Primera parte de esta trilogía de ciencia ficción.
En la costa de lo que una vez fue el golfo de México, la gente sobrevive desguazando antiguos petroleros y buques mercantes, y malvendiendo lo que encuentra a las grandes empresas. Nailer y sus compañeros, la «cuadrilla ligera», afrontan el trabajo más arriesgado: meterse en las entrañas de los barcos a rebuscar. Es una profesión dura en un mundo duro, en el que nadie cuida de nadie y gana el más rápido.
Sin embargo, la suerte sonríe a Nailer el día que descubre un hermoso velero encallado en las rocas. Con lo que saque del naufragio, podría abandonar la playa. Pero dentro también hay una prisionera: si la mata, será rico; si la ayuda a regresar con los suyos... empezará la aventura.
Isadora Moon es especial porque es diferente.
Su mamá es un hada, su papá es un vampiro y ella tiene un poquito de los dos. Por eso, cuando se van de picnic, todo puede pasar...
Isadora está triste y le pide a una ninfa del pozo de los deseos ser feliz siempre. Pero estar feliz todo el tiempo igual no es tan bonito como parece... ¿Podrá deshacer el deseo y volver a sentir todas sus emociones?
«En medio del campo donde plantábamos patatas, con el incesante gorjeo de las alondras de fondo, le pregunté qué lugar elegiría si de repente un genio se cruzase en su camino para hacer realidad el viaje de sus sueños. “El Polo Norte”, me respondió. Yo apenas tenía diez años. Debía rondar esa edad cuando, una noche de verano, delante de la puerta de casa, mi padre me señaló la presencia titilante de la estrella polar, que no duerme, que permanece ja en el cielo y sirve al navegante para no perder jamás el rumbo.Por su ochenta cumpleaños, le regalé un viaje a la Tierra de Baffin, más allá del círculo polar ―en el Polo Norte. Estas páginas cuentan la parte visible». Estética del Polo Norte es un diario de viaje, una losofía del frío y una meditación sobre los males de la civilización. Onfray reexiona sobre el espacio, la naturaleza pero también sobre la nostalgia. Un texto denso, lírico e inteligente donde el autor asume su filosofía objetiva y silenciosa.
«El espacio ha sido un gran misterio ―quizá el mayor de todos― profundamente adormecido desde hace mucho tiempo, sobre todo desde la ya lejana época de Kant, que parecía haberlo puesto en el lugar que le correspondía. Nos creíamos que ya estaba todo dicho sobre él, cuando en realidad ese todo no era casi nada. Entonces Albert Einstein, un físico de gran talento, lo rozó con su varita y, en ese momento, despertó para cobrar vida, multiplicarse, poblarse de hechos y acontecimientos inesperados, ensancharse hasta perderse de vista, imaginación y razón, y adquirir una cuarta dimensión. Desde entonces, el espacio y el tiempo, su hermano incognoscible, celebran unas maravillosas nupcias bajo nuevos aspectos a las que están invitados todos los hombres de buena voluntad.» Desde la publicación de La Teoría General de la Relatividad de Albert Einstein en 1915, la reflexión sobre el espacio se convirtió en un tema de interés popular. Ha habido muchos intentos de interpretar el significado de la teoría en su relación con la vida cotidiana, algunos muy imaginativos. Es por esta razón que La vida del espacio adquiere un significado especial.