El conde Drácula es una creación literaria gestada en un espacio y tiempo concretos. El lugar de procedencia de Drácula, los Cárpatos rumanos, no fue visitado por Stoker, y los conocimientos que este tenía acerca del país parecen provenir de las consultas a una guía de viajes y, principalmente, de las conversaciones con un supuesto profesor de origen húngaro llamado Arminius Vambery. La combinación de elementos tales como la necrofilia, la seducción de vírgenes por fuerzas sobrehumanas y diabólicas y una persistente atmósfera sexual y violenta que envuelve y atrapa de forma irresistible a quien la contempla, confieren al vampirismo literario una capacidad de influencia fuera de lo común.
El poema consta de 5675 hexámetros y describe solamente un episodio de la guerra, con una duración de cincuenta y un días, y haciendo especial énfasis en la disputa entre Aquiles y Agamenón, la cólera del primero y sus terribles consecuencias. El que pudiéramos llamar «ciclo troyano» comprende además de la Ilíada, los siguientes poemas: La Cipriada, Los Nostoi, Odisea y La Telegonía.
La Divina Comedia está dividida en tres actos: Infierno, Purgatorio y Paraíso. Se trata de una alegoría en la que el hombre, enfrentado a sus propios pecados y a la purificación de los mismos, alcanza su plena liberalización espiritual. La obra es un admirable tratado de filosofía, de teología, de astronomía, de mitología, de moral, de hagiografía..., no como datos del pasado, sino, como apertura a lo por venir, como presagio de futuros tiempos pasados. El libro de Dante Alighieri es un monumento revelador de la cultura clásica y, por ello lo contiene todo, sin olvido siquiera de los Evangelios Apócrifos. A su autor se le considera el padre de la lengua italiana.