Las grandes ideas de los entrenadores de fútbol más sabios del mundo.
El fútbol es una batalla de ideas. Los equipos se enfrentan a partir de conceptos pensados por sus entrenadores y buscan “convencer” al contrario del modo más rotundo: venciéndole e imponiendo su idea propia.
Desde sus orígenes, el fútbol ha desarrollado grandes ideas que han evolucionado, han chocado entre sí, se han hibridado y mutado por deseo o necesidad, generando grandes escuelas de pensamiento futbolístico.
El fútbol no ha hecho más que emular a la filosofía, como si se tratara de universos paralelos, tal como dijera en su día Zlatan Ibrahimovic sin percatarse de que su afirmación no era ningún insulto sino una definición exacta de este deporte, detrás del que se ocultan grandes ideas.
La idea de futuro a veces nos asusta con escenarios apocalípticos. En otras ocasiones, se ofrece como una oportunidad de redención, como si fuera posible resolver, más adelante y por arte de magia, todos los problemas del presente. En todo caso, las ilusiones nos alejan de lo que está a nuestro alrededor. En esta nueva colección de textos, Ailton Krenak nos provoca con la radicalidad de su pensamiento insurgente, que desplaza al sentido común e invoca la maravilla. Dice Krenak: «Los ríos, esos seres que siempre habitaron los mundos en diferentes formas, son quienes me sugieren que, si hay un futuro a pensar, ese futuro es ancestral, porque ya estaba aquí».
Este Tercer libro de crónicas reúne algunas de las crónicas que António Lobo Antunes escribió entre 2002 y 2004. El oficio de escritor y las dudas que lo asaltan («¿seré capaz?»), su estancia en Angola, la infancia «en una casa con una acacia», la familia(«estos seres extraños en los que se prolongan nuestras facciones»), el amor, lo efímero y lo eterno son algunos de los temas recurrentes de sus novelas, que desarrolla también en las crónicas. Los múltiples registros del autor, la sutileza de su humor, su virtuosismo y el arte de llevar al lector de la sonrisa a la emoción extrema hacen que estos textos se lean con una enorme facilidad.
La vida no es una carrera. No hay ganadores ni perdedores. A muchísimas personas les va mejor que a ti… y muchísimo peor», se repite Luke. Durante más de diez años, Luke Healy ha invertido toda su autoestima en su carrera. Pero entonces, casi de la noche a la mañana, parece que todo se desvanece.
Con el telón de fondo de un clima global que cambia peligrosamente, La autoestima y el fin del mundo abarca dos décadas de tragicómico autodescubrimiento, hasta que a Luke se le presenta la posibilidad de que su obra renazca en Hollywood. Pero ¿a qué precio?¿Qué sucede cuando no eres quien necesitas ser? Y, en última instancia, ¿quién puedes ser en el fin del mundo?
Año 1664. Antonio Sebastián de Toledo, marqués de Mancera, es nombrado virrey de la Nueva España por Felipe IV para atender una importante misión secreta. El rey sospecha, advertido por las visiones de sor María Jesús de Ágreda, una monja con el poder de la bilocación, que en México se está fraguando una conspiración contra él.
El marqués recurre a su hombre de confianza, Taranis de Cárabes, que se desplaza hasta el lejano norte chichimeca para averiguar lo que ocurre. Allí conocerá a Azdsáán atsáhaa, una indígena dos espíritus que se convertirá en su compañera inseparable y en su prohibido objeto de deseo. En aquellas tierras de frontera destaparán una trama de tráfico de esclavos indígenas y de explotación de minas de plata a espaldas del reino. La conjura ha sido orquestada por La Rueda, un grupo que conspira para hacer caer al rey de España y que ha logrado infiltrar en la misma corte del virrey a adeptos que tratarán de desestabilizarlo de mil formas, atentando incluso contra la vida de su mujer y de su hija.
Pasión, sexo, juego de seducción...
¿Quién es quién en la corte de los Monteros?
Siglo XVIII. Julia Ponce de León, hija del pintor de cámara del rey, es una de las muchas cortesanas que habitan en el palacio real de Madrid. Su vida ha sido diseñada al milímetro: le han enseñado cómo sentarse, qué decir, cómo vestirse y a quién amar. Pero la corte de los Monteros es un lugar lleno de secretos y Julia está a punto de descubrir que en palacio todo son apariencias y lo que prima es el juego.