El autor Ben Mears regresa a Salem's Lot para escribir un libro sobre la casa que le atormenta desde que era solo un niño. Sin embargo, al llegar se encuentra su aislado pueblo invadido por vampiros. Y, conforme las criaturas sedientas de sangre reclaman más víctimas, Mears se hace cargo de convencer a un pequeño grupo de creyentes para oponerse a los no muertos.
Salem's Lot es un pueblo tranquilo donde nunca pasa nada. O quizás esto son solo apariencias, pues lo cierto es que sí se están sucediendo diversos hechos misteriosos, incluso escalofriantes...
Veinte años atrás, por una apuesta infantil, Ben Mears entró en la casa de los Marsten. Y lo que vio entonces aún recorre sus pesadillas. Ahora, como escritor consagrado, vuelve a Salem's Lot para exorcizar sus fantasmas.
Salem's Lot es un pueblo tranquilo y adormilado donde nunca pasa nada..., excepto la antigua tragedia de la casa de los Marsten. Y el perro muerto colgado de la verja del cementerio. Y el misterioso hombre que se instaló en la casa de los Marsten. Y los niños que desaparecen, los animales que mueren desangrados... Y la espantosa presencia de Ellos, quienesquiera que sean Ellos.
Para Rufus Van Aldin, un reputado millonario, no hay nada más importante que su hija, Ruth Kettering, y se desvive por hacerla feliz. Pero Ruth, pese a tenerlo todo, echa en falta lo más importante, el amor puro y genuino que ya no tiene en su matrimonio. Atormentada por un pasado que regresa para ponerla a prueba, decide emprender un viaje en el conocido Tren Azul, rumbo a la costa francesa. Lleva consigo un famoso rubí, el Corazón de Fuego, regalo de su padre. Durante la travesía, Miss Kettering es asesinada y la joya, sustraída; ironías del destino, Poirot, que también viaja en el tren, se hace cargo de la investigación del crimen. Valiéndose de sus células grises y de la ayuda de la señorita Gray, otra pasajera del tren a quien todo el mundo confiesa sus secretos, Poirot deberá enfrentarse a otro desafío en el que el peligro acecha detrás de cada puerta.