Trece años después de publicar una irónica y férrea defensa de la igualdad de género en La mujer del porvenir y probablemente inspirada por History of Woman Suffrage, de Elizabeth C. Stanton, Susan B. Anthony y Matilda J. Gage, Concepción Arenal cuestiona que el rol femenino de ángel del hogar sea tan virtuoso como muchos consideran.
La mujer de su casa es un texto fundamental en la historia del feminismo español. Mordaz, afilado y directo, señala una gran paradoja: ¿por qué se convierte a madres y esposas en faros morales de sus familias al tiempo que se les cierran las puertas a cualquier otro tipo de decisión o protagonismo en la esfera pública?
¿QUIÉN ES, EN REALIDAD, LA MUJER DEL PISO DE ARRIBA?
La muerte de Dorotea y el deseo de desaparecer propician el regreso de su nieta a la pequeña localidad de Lanuza, en Huesca. El ambiente que la recibe dista mucho de la paz que venía buscando: los vecinos la tratan con recelo y la inquilina de su abuela, una escritora de renombre con fama de rehuir la sociedad, ha dejado atrás todas sus pertenencias y ha desaparecido. Poco a poco, la curiosidad y el deseo de ahuyentar sus fantasmas despiertan en ella el impulso de apropiarse de la vida de la inquilina en una fusión de identidades que parece haber comenzado antes de su llegada al pueblo. ¿Quien es realmente la mujer que ocupa el piso de arriba? ¿Se trata de la nieta de Dorotea o de la famosa escritora? ¿Será cierto que alguien observa todos sus movimientos?
Un juego de desdoblamientos, un magistral doppelgänger, una historia repleta de giros y suspense.