Cata y Leo vienen de mundos muy distintos. Ella es una de las escritoras de novela romántica más famosas del momento, con todo lo que eso supone. Él, en cambio, lleva una vida mucho más tranquila como dueño de una pequeña y desconocida librería. Aun así, ambos comparten la misma pasión: el amor por los libros.
Sin embargo, para Cata no está siendo fácil escribir su nueva novela. Se pasa los días delante de una hoja en blanco, totalmente bloqueada. Así que cuando recibe una invitación para asistir a un festival de escritores en la ciudad de sus sueños, lo interpreta como una señal. ¿Será ahí donde encuentre por fin la inspiración? ¿Qué ocurrirá cuando un malentendido cruce su camino con el de Leo?
Amor, reconciliación, perdón y ternura. La tercera entrega de El juego perfecto te robará el corazón por completo.
Blanca y Cam se quisieron como nadie, pero, en ocasiones, amar demasiado no es sinónimo de amar para siempre. Han pasado los años y, aunque siempre han estado pendientes el uno del otro, no se dirigen la palabra. Eso cambia cuando Cam sufre un gravísimo accidente y Blanca siente que no puede estar alejada de él. Ella desea su recuperación más que nada en el mundo. Juntos llegarán no solo a sanar las heridas abiertas, sino a cerrar las de un pasado que ninguno de los dos ha logrado olvidar. ¿Podrán darse una nueva oportunidad y dejar de fingir que no se aman?
¿Te atreves a ser quien eres de verdad?
«Son muchas las historias de amor que se malgastan por culpa de los prejuicios, la cobardía e incluso la ignorancia. Por suerte, nosotras tuvimos el coraje necesario para empezar nuestro cuento de hadas y seguir adelante. Bastó un primer encuentro, una primera conversación, para darnos cuenta de que queríamos estar juntas, compartir nuestras mañanas, tardes y noches, toda nuestra vida, para siempre.»
La historia de Carla y Noelia es la historia de muchas otras chicas y chicos que tratan de descubrir quiénes son. En su libro, resuelven dudas, desmontan tabúes y comparten su experiencia y su camino hacia donde están hoy en día.
Una mala racha. Así es como podría llamarse a lo que está viviendo Sookie. Primero, su compañero de trabajo es asesinado y a nadie parece importarle. Luego se encuentra cara a cara con una criatura sobrenatural y casi muere en el ataque. Afortunadamente los vampiros le salvaron la vida, así que cuando le piden que busque a uno de ellos, desaparecido en Dallas, Sookie no lo duda ni un momento: les debe un favor.
Se supone que el trabajo es fácil: debe entrevistar a ciertos humanos involucrados en la desaparición. Solo hay una condición, los vampiros deben prometer comportarse y dejar que los humanos salgan ilesos. Más fácil decirlo que hacerlo. Todo lo que se necesita es un pequeño error para que las cosas se vuelvan mortales...
Una trepidante novela romántica en la que un supuesto feliz matrimonio acabará desencadenando una trama repleta de acción, engaños e intriga.
Desde que conocí a Finley mi vida ha sido un cuento de hadas: un matrimonio de película, lujo por doquier y un hombre a mi lado que me ha hecho feliz durante todo el tiempo que ha durado el engaño.
Nunca imaginé que mi marido llevara una doble vida, por eso me sentí tan traicionada cuando lo descubrí y decidí alejarme de él.
Sin embargo, Finley no estaba dispuesto a consentir mi marcha. Yo era una pieza que no se podía permitir perder en su retorcido plan, así que ideó otro mucho más retorcido que el anterior para que volviera.
Una novela que nos habla del amor en el siglo XXI y, sobre todo, del amor propio, el crecimiento personal y la lucha contra los estándares sociales.
Karma (Laura) es una mujer que roza los treinta. Trabaja de teleoperadora en unos grandes almacenes y comparte piso con su amigo Roberto. Son una dupla galáctica y funcionan mejor que cualquier matrimonio convencional.
La vida de Karma da un vuelco de ciento ochenta grados cuando conoce a Leo, su match de Tinder. Leo acaba con todos sus miedos y hace que se sienta como una diosa en la cama y fuera de ella.
Sin embargo, ella convive con los monstruos de su pasado, con la carga de pesar más de lo que la sociedad acepta como normativo, con la necesidad de volver a terapia y con la creencia de tener una autoestima que en realidad no es tan férrea como ella piensa.
Karma somos un poco todas, Karma se construye de todas las mujeres que me inspiran, Karma soy yo.