Villa Melania es una absorbente saga familiar que evoca otra era de forma realmente bella. Algunas puertas están cerradas por alguna poderosa razón.
«Es posible que todos estemos algo resquebrajados por dentro, que nadie conserve intacta la luna del espejo en el que nos contemplábamos siendo niños.»
En Villa Melania hay una habitación llena de espejos rotos y de recuerdos trágicos. En la mansión señorial de los Lanuza Vega, con su prado de caléndulas y su anciana jacaranda, se pasean los fantasmas de varias vidas truncadas en la noche de la víspera de Reyes de 1966, cuyo eco resonará de manera ensordecedora ese mismo día en 2019. El retrato de Melania, la hermosa y dañada Melania, sigue presidiendo la casa tantos años después. Sus pasos se escuchan sobre tarimas y escaleras; buscan a esa persona capaz de oír a los objetos contar sus historias. Esas historias que ni las hermanas ni el buen cuñado de Melania quieren contar; esas historias que Camila, su sobrina nieta, descubrirá demasiado tarde; esas historias que solo Cloe, la hermana de Camila, sabrá atender y comprender.
Muerte, melancolía, enfermedad, pero también celos, envidia, dolor y miedo acechan desde esos espejos rotos en los que se refleja lo que fueron y lo que son quienes alguna vez vivieron en esa casa. Solo existe una manera de arreglar las lunas y las vidas quebradas: hablar, porque «al callar enterramos a nuestros muertos un poco más hondo».
Nápoles, 1900. Fabio, el dueño del teatro Dellanotte, parte de viaje por un año, y encarga a sus dos hijos: Adriano, violonchelista ciego, y Carlo, la responsabilidad de regentar el teatro de la ópera. Pero tras su partida, todo va a cambiar. Sus hijos, aunque Carlo está casado, se enamoran de la misma misteriosa mujer. Su esposa desarrolla aficiones que no imaginaría. Y un sanguinario asesino en serie se dedica a matar en el teatro, siguiendo las pautas de un antiguo manuscrito que narra la vida de Diane, la criada muda de la envenenadora marquesa de Brinvilliers, en el París del Rey Sol. Para atraparlo, recibirán la ayuda de Gianni Leone, colaborador del fundador de la escuela italiana de antropología criminal Abele de Blasio. Se valdrá de sus nuevos, pero aún no probados, métodos científicos, para lograrlo… ¿o no?
"Un mismo principio puede curar o matar, que no es otra cosa que sanar de la vida".
Diego Fischer rescata del olvido a Bernardo Berro, que luchó para liberar a su país de la violencia que asolaba Uruguay en el siglo XIX
Bernardo Berro es el protagonista de esta cautivadora historia. Un hombre ilustrado que anhelaba ser campesino y vivir en comunión con la naturaleza y llegó a ser el quinto presidente constitucional de la República.
Luchó con toda la fuerza de las ideas contra el vendaval que marcó su trayectoria política para terminar arrebatándole la vida.
Una historia narrada a ritmo de vértigo con un lenguaje directo y con recursos propios de una novela. De este modo el autor logra pintar una época de dolor y de violencia en la que las divisas históricas fueron dando forma y sustento a Uruguay.
En Qué poco vale la vida salen a la luz por primera vez documentos y cartas que durmieron en un archivo privado durante más de un siglo y medio, y que brindan una sorprendente mirada sobre las páginas más sangrientas de este país en el siglo XIX.
Una travesía hacia una tierra en lucha para sanar las heridas y encontrar el amor.
Alma Parsehyan padece dolores en el abdomen. Un sufrimiento ancestral que viene de que su familia fue víctima del genocidio armenio. Ella también vivió su propio infierno y escapó. Pero necesita sanar.
Así, emprende un viaje hacia Artsaj. La guerra se interpondrá y Alma volverá a sobrevivir, aunque esta vez gracias al amor.
Divertida, sexy,fashiony un poco aterradora.
Segunda entrega de Pandora English, una fascinante serie de fantasía ambientada en el glamuroso mundo de la alta costura.
Ya han pasado dos meses desde que Pandora dejó su pequeño pueblo natal y se instaló en la mansión encantada de Spektor. Gracias a su tía abuela y Luke -el espíritu de un alférez muerto hace doscientos años, pero al que Pandora encuentra enormemente atractivo-, está empezando a entender la importancia del legado de la familia Lucasta, que su madre siempre le ocultó.
Aunque el don excepcional que ha heredado conlleva una gran responsabilidad, en el mundo de los mortales Pandora no encuentra la manera de sobresalir ni de que su jefa se dé cuenta de sus cualidades.
Saoirse Clarke tiene diecisiete años y no cree en el amor. No está buscando una relación pero cuando conoce a la irresistible Ruby todo salta por los aires… más o menos. Porque Ruby le propone pasar el verano teniendo las típicas citas de las películas de amor pero sin comprometerse: al final del verano, cada una seguirá su camino. Ni rupturas ni corazones rotos. Ese sería un plan perfecto si no se hubieran olvidado de que al final de las películas los dos personajes se han enamorado de verdad.