¿Conoces esa historia de amor en la que la princesa se queda hecha unos zorros y tiene que irse a otro reino y empezar de cero?
No es bonita. Te lo digo yo, que la he vivido. Pero no te preocupes, siempre caigo de pie. Bueno, igual esta vez el patinazo ha sido un poco más sonoro y público. Tanto que he tenido que montarme en el coche, conducir seiscientos kilómetros, zurrar a una máquina expendedora por el camino y regresar al lugar al que ya no sé si puedo llamar casa. De momento, me está costando llamar a la puerta.
Dame un segundo para hacerme a la idea. Un segundo más.
Cuando fui un Angel del Cielo, la nueva novela de Marcos Rodríguez, coloca al lector ante un espejo. Así, cabe entender que la experiencia que arrojará como saldo la lectura será extraordinariamente personal, inequívocamente única. Se precisa, sin embargo, de una aclaración: el efecto de espejo que provoca la lectura de la novela es un resultado no una coincidencia literal entre la vida de los lectores y las terribles historias que, como afluentes, conforman el gran relato que nos cuenta Rodríguez. Es decir, el efecto al que me refiero consiste en que, durante el proceso de lectura y luego de culminado el mismo, el autor logra la actualización de las preguntas qué más angustian al alma humana: ¿Cuál es el objeto de la vida? ¿Quiénes somos y de dónde venimos?
Una vez más la técnica narrativa precisa y la prosa meticulosamente elaborada coronan el trabajo de un escritor concienzudo y comprometido con el oficio, quien ante todo, conserva la fe en la posibilidad de redención del alma humana.
Gerardo Castillo Javier, Escritor, poeta y crítico literario
Al leer Cuando las Palabras Copulan de Manolo Pichardo inmediatamente advierto que se trata de un autor que asume la poesía con respeto y vocación. Lo hace porque sus mismos textos acusan precisión, ingenio y valor artístico indiscutible y advierto además que no se trata de una incursión pasajera en el género, sino de una asunción que permite auscultar nuevos hallazgos y una presencia continuada en los quehaceres literarios... Mateo Morrison
Un recorrido por los orígenes literarios de una de las nuevas promesas de las letras españolas.
Cultivos es la segunda entrega del ciclo «Piezas de Resistencia», que Julián Rodríguez abriera en 2004 con Unas vacaciones baratas en la miseria de los demás. Volumen de memorias, diario y cuaderno de notas, habla de la relación de su autor con el mundo rural del que procede y de su descubrimiento de las palabras. Es un libro sobre el aprendizaje de escribir, sobre la «demolición» de algunos proyectos personales y políticos y sobre la importancia real de la literatura en este tiempo, ahora.
Un ensayo para pensar el futuro de la cultura y cómo esta puede cambiar el mundo.
En pocos momentos como en el actual, la cultura ha gozado de tanto crecimiento como de tan mala consideración o indiferencia. Parece que ha sido relegada a un mero acto de consumo, en vez de ser un espacio de creación de lazos y comunidad. Por este motivo, y dada la urgencia, nace este libro: para repensar la cultura y hacerla nuestra, aceptando todas sus dimensiones, incluso aquellas que hemos olvidado. Debemos resituarnos frente a ella no solo posicionándonos como consumidores, sino como agentes que la potencian en los espacios cotidianos, y así volver a interpelarnos y compartirla con aquellos que nos rodean.
Cultura ingobernable parte de las nociones históricas sobre la cultura para llegar a una concepción transversal y amplia en la que trabajar todos juntos para fortalecer el tejido social. El fenómeno cultural no constituye nada extraordinario ni necesariamente privado o ligado al tiempo de ocio exclusivamente; sus diversas manifestaciones han de estar vinculadas a la cotidianidad y deben ser un proyecto colectivo; una práctica inacabada, pero también inagotable.