Elísabet Benavent, también conocida como @BetaCoqueta, regresa con más fuerza que nunca para hablarnos de amor y de amistad a partes iguales, de melodías que fuimos, de momentos que seremos. Fuimos canciones es la primera parte de su bilogía «Canciones y recuerdos», que apunta directamente al corazón de sus lectoras, aquellas que se atrevieron con Valeria a ser ellas mismas.
Diez relatos que concentran lo mejor de la escritura de Rafael Gumucio: el desparpajo, las paradojas, la mirada entrañable hacia las relaciones familiares, la madre como una figura tan compleja como esencial para los personajes, la compasión risueña por la torpeza propia y ajena, la feliz mezcla de historia e imaginación. Ambientadas en Puerto Príncipe, París, Nueva York y Santiago, así como en algunos paisajes mentales, estas historias muestran a padres incapaces de dejar crecer a sus hijos, a hijos incapaces de dejar libres a sus padres, a chilenos intentando aprender inglés en Nueva York, atrapados por la burocracia municipal, en duelo bajo los efectos de la marihuana o compartiendo con Evo Morales la celebración de su cumpleaños.
Un mes de marzo, una agencia de colocación envía a una joven empleada del hogar a casa de un huraño profesor retirado. Sin embargo, no es un profesor cualquiera: antaño fue un reconocido matemático pero, tras un trágico accidente, solo recuerda lo ocurrido en los últimos ochenta minutos. Aunque siguen apasionándole los números, debe apuntar las cosas importantes en papelitos para repasarlas todos los días, incluida la identidad de quienes lo rodean; una situación que lo vuelve muy vulnerable. Sin embargo, el profesor irá aceptando en su vida la irrupción de la asistenta y de su hijo de diez años, con quien comparte una pasión: el béisbol. Poco a poco se irá fraguando entre los tres una hermosa relación fundada en el afecto y la transmisión del saber. Una novela que devuelve la esperanza en el alma humana.
Horas antes de partir hacia su segunda vuelta al mundo, J. J. Benítez recibe una carta procedente de EE. UU. La carta es abierta, pero no leída. Juanjo embarca en el Costa Deliziosa y, en plena navegación, surge la pandemia del coronavirus. Y todo cambia. Lo que se presentaba como un viaje de placer se convierte en un caos. El escritor navarro lleva un cuaderno de bitácora en el que registra las incidencias de cada día. La gran catástrofe amarilla es una vertiginosa mezcla de aventuras, conversaciones, temores y esperanzas. Al regresar a España, Juanjo Benítez lee la carta procedente de California y queda atónito. Nada es lo que parece. El final del libro es de infarto.
La guía definitiva para reconocer y afrontar la depresión.
La depresión es la enfermedad de la tristeza. Cabalgan en su interior un abanico de sentimientos que van desde la melancolía al desencanto, pasando por la falta de ganas de vivir. Y hablar de depresión es adentrarse en un túnel oscuro, en el que parece que nunca se va a encontrar la salida.
Con su profundo conocimiento, el psiquiatra Enrique Rojas nos va dando respuestas a muchos interrogantes: ¿cuáles son sus principales síntomas?; ¿cómo debe tratar la familia a una persona que está pasando una depresión?, ¿qué es la depresión posparto?, ¿cómo se pueden prevenir las depresiones primaverales? o ¿cómo se mezclan la depresión y la ansiedad?, son sólo algunos de ellos.
Hoy sabemos que más del 90% de las depresiones endógenas se curan: adiós, depresión.
La personalidad es la tarjeta de visita de cada uno. Tiene tres raíces: la herencia (temperamento), la influencia del ambiente (carácter) y los diversos aprendizajes de la vida (biografía), y consiste en una forma particular de ser, pensar, sentir y reaccionar.
Éste es un libro sobre la personalidad. El psiquiatra Enrique Rojas ha sabido exponer el tema de forma clara, con capacidad de penetración psicológica y con un buen sentido didáctico para explicarnos las principales cuestiones que se hospedan detrás de la pregunta que da título a esta obra: ¿quién eres?
En este recorrido que va de la personalidad a la autoestima, uno puede acercarse a ese objetivo aparentemente difícil: conocerse a sí mismo.
La felicidad no se da en el superhombre, sino en el hombre verdadero y la puerta de entrada al castillo de la felicidad es tener una personalidad madura.