El oscuro protagonista de esta novela es un automóvil marca Plymouth de 1958 llamado Christine, un superviviente de un tiempo en que la gasolina era barata y el rock and roll marcaba el ritmo de la época.
Arnie Cunningham está dispuesto a conseguir el Plymouth del 58 a cualquier precio. Y lo consigue. Pero mientras trabaja en la ardua tarea de restaurarlo, el coche da muestras de una terrible vida propia.
¿O son solo imaginaciones? Dennis sigue creyéndolo así, pero la gente muere en las oscuras calles y avenidas de Libertyville. Y llega un momento en que Dennis ya no puede negar la aterradora verdad.
Christine está viva.
El escalofriante caso de una joven de apariencia insignificante que se transformó en un ser de poderes anormales, sembrando el terror en la ciudad. Con pulso mágico para mantener la tensión a lo largo de todo el libro, King narra la atormentada adolescencia de Carrie, y nos envuelve en una atmósfera sobrecogedora cuando la muchacha realiza una serie de descubrimientos hasta llegar al terrible momento de la venganza.
Neale Donald Walsch prosigue su enriquecedora experiencia en forma de penetrantes diálogos que no desafían a ampliar nuestra perspectiva, a reconstruir nuestro mundo, nuestra sociedad y a nosotros mismos. Este segundo volumen de la trilogía es un libro para comprometerse, una invitación a la meditación diaria, un mensaje de optimismo.
Esta obra es la brillante conclusión a la trilogía iniciada con Dune, la Casa Atreides y seguida en Dune, la Casa Harkonnen, y un valioso complemento al emocionante universo del inmortal Dune de Frank Herbert.
Orar por un cambio en nuestras esposas es invitar a Dios para que también haga grandes cosas en nuestra vida. Caballeros, ¿Qué desean para sus matrimonios? Amas a tu esposa, y más que ninguna otra cosa deseas verla feliz, próspera y creciendo a tu lado. Y no hay mejor manera de amarla que orar por ella.
La zona muerta es una de las mejores y más espeluznantes obras de Stephen King.
A John Smith le horrorizó descubrir que había pasado más de cuatro años en coma. Pero le horrorizó aún más descubrir que podía conocer las cosas por anticipado. Él sabía que aquel hombre perverso iba a convertirse en presidente de Estados Unidos e iba a destruir el mundo. Y por eso tenía que matarlo...