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LA FRONTERA LLEVA SU NOMBRE (BOL)

Desde finales del siglo XIX y hasta los años cincuenta del siglo pasado, las jóvenes más humildes de los valles del Pirineo navarro y aragonés cruzaban a pie las montañas para trabajar en las fábricas de alpargatas del lado francés. Como las golondrinas, marchaban en octubre y regresaban en primavera, llenas de ilusión y cargadas de telas y enseres para el ajuar que constituiría su aportación a un futuro matrimonio. Esperanza Ayerra es biznieta de Esperanza, una golondrina que cruzó los Pirineos en 1913 y a la que la mayor contienda mundial robó su porvenir. Es nieta de Esperanza, conocida como Perla, que no tuvo padre, ni marido, por el cruel destino de una España dividida. Es hija de Espe, una mujer que se tragó sus penas y a la que la historia dejó sin aire. Es el fruto de la frontera entre dos países que se alejan y se acercan cuando sus pobladores se enamoran.
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LA FRAGILIDAD DE UN CORAZON (BOL)

A veces, volver para decir adiós es lo único que puede salvarnos. ¿Qué ocurre cuando lo único que te queda es un corazón roto, un futuro incierto y la vuelta a la casilla de salida? Darcy abandonó Tofino un día de diciembre, cargada de sueños rotos y promesas sin cumplir. Desde entonces, no ha hecho otra cosa que huir de los recuerdos y sus heridas. Ahora, sus pasos la han llevado de nuevo al principio. A un lugar donde el amor y la culpa colisionan. Donde la lluvia cuenta historias y esconde secretos. Porque hay instantes que marcan toda una vida. Porque, a veces, volver para decir adiós es lo único que puede salvarnos.
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LA FIRMA DE TODAS LAS COSAS (BOL)

En los albores de un nuevo siglo, en un invierno característico de Filadelfia, nace Alma Whittaker. Su padre, Henry Whittaker, es un explorador botánico audaz y carismático cuya vasta fortuna oculta unos orígenes humildes: comenzó de pilluelo en los jardines Kew de Sir Joseph Banks y de grumete a bordo del Resolution del capitán Cook. La madre de Alma, una estricta holandesa de buena familia, sabe tanto de botánica como cualquier hombre. Niña independiente, con una sed de conocimientos insaciable, Alma no tarda en adentrarse en el mundo de las plantas y de la ciencia. Sin embargo, a medida que el minucioso estudio de los musgos la acerca más y más a los misterios de la evolución, el hombre al que ama la arrastra en la dirección opuesta: al mundo de lo espiritual, lo divino y lo mágico. Ella es una científica de mente despejada; él es un artista utópico. Pero lo que une a esta pareja es la pasión compartida por el saber: el desesperado deseo de comprender cómo funciona el mundo, de qué están hechos los mecanismos de la vida.
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