Toño Azpilcueta pasa sus días entre su trabajo en un colegio, su familia y su gran pasión, la música criolla, sobre la que lleva investigando desde su juventud. Un día, una llamada le cambia la vida. Una invitación para ir a escuchar a un guitarrista desconocido, Lalo Molfino, personaje del que nadie sabe demasiado pero de gran talento, parece confirmar todas sus intuiciones: el amor profundo que siente por los valses, marineras, polkas y huainos peruanos tiene una razón más allá del placer de escucharlos (o bailarlos).
Marlo Morgan no tenía edad ni talante de aventura, pero la realidad se le impuso con la fuerza y el poder que suelen trasmitirnos las grandes experiencias. Así fue como vivió una odisea fascinante: un viaje a pie por el desierto australiano en compañía de una tribu de aborígenes cuyas leyes de convivencia nada tienen en común con las nuestras.
El aprendizaje fue duro, pues a lo largo de esa extraña peregrinación tuvo que desprenderse de sus antiguos hábitos y aprender distintas formas de comer, de caminar y de comunicarse para poder gozar, al fin, de una auténtica comunión con la naturaleza y con esa parte de su cuerpo y su mente que ella misma desconocía.
Detrás de las altas paredes perimetrales, más allá de los portones reforzados por barreras y flanqueados por garitas de vigilancia, se encuentra Altos de la Cascada. Afuera, la ruta, la barriada popular de Santa María de los Tigrecitos, la autopista, la ciudad, el resto del mundo.
En Altos de la Cascada viven familias que llevan un mismo estilo de vida y que quieren mantenerlo cueste lo que cueste. Allí, en el country, un grupo de amigos se reúne semanalmente lejos de las miradas de sus hijos, sus empleadas domésticas y sus esposas, quienes, excluidas del encuentro varonil, se autodenominan, bromeando, "las viudas de los jueves". Pero una noche la rutina se quiebra y ese hecho permite descubrir, en un país que se desmorona, el lado oscuro de una vida "perfecta".
Tras el fenómeno mundial de La buena suerte, con más de 4 millones de ejemplares vendidos, llega Las siete llaves.
Álex Rovira y Fernando Trías de Bes creían que el éxito de La buena suerte les permitiría vivir conforme a sus deseos. Sin embargo, con el tiempo, se dieron cuenta de que todavía les quedaba un largo camino por recorrer hasta alcanzar la verdadera plenitud en sus vidas: la conquista de la libertad vital.
En este libro, los autores nos descubren que tener éxito no significa ser libre y que es necesario desprenderse de algunos grilletes que nos esclavizan, a menudo sin darnos cuenta, en forma de consejos, normas, valores y criterios. Y para abrir cada uno de estos grilletes hacen falta llaves. Ellos han identificado siete: la llave de la creencia, la llave del juicio, la llave del logro, la llave del disfrute, la llave de la entrega, la llave de la identidad y, la más importante, la llave del ser. Aprender a utilizarlas nos permitirá vivir en coherencia con nuestros principios y anhelos.
El secreto no es ser libre, sino no ser esclavo. Una vida plena solo es posible desde la libertad vital.
La Italia del siglo XV es una tierra desgarrada por guerras, intrigas y traiciones, gobernada por señores a veces cautos, pero a la vez sedientos de poder y, en ocasiones, sanguinarios. Esta es la historia de la Italia del Renacimiento, una historia que marcará el futuro de Europa.
En Milán, Filippo Maria, el último Visconti, ante la ausencia de hijos varones, intenta garantizar su legado casando a su pequeña hija con Francesco Sforza, un prometedor hombre de armas. Mientras tanto, trata de sobornar al conde de Carmagnola para atacar a los Condulmer, los patricios de Venecia. Estos, repelen el ataque y logran el ansiado trono de Roma a través del papa Eugenio IV, a pesar de la oposición frontal de la familia Colonna. El apoyo de los Mecici, el doble juego de los Saboya, el enfrentamiento entre angevinos y aragoneses en el sur en una guerra cada día más descarnada y el avance de España y Francia en el tablero de tratados y alianzas del continente, marcan a siete dinastías dispuestas a todo por perpetuar a los suyos en el poder.
Bree Camden está perdida y secretamente enamorada de su mejor amigo (y también estrella de fútbol americano) Nathan Donelson. Pero ese no es el único problema que tiene. Después de un accidente que pone fin a su sueño de ser bailarina, Bree se dedica a llevar su propia escuela de danza... mientras pueda pagar el alquiler, claro.
Cuando Nathan acude al rescate y compra el edificio en el que se encuentra su negocio, la orgullosa Bree no se lo toma del todo bien. Tras un par (bueno, quizá más) de chupitos de tequila, se va de la lengua delante de una periodista y el mundo entero termina creyendo que ella y Nathan están destinados. Con la superbowl a la vuelta de la esquina, estos dos «nada más que amigos» se ven obligados a fingir una relación ante las cámaras durante tres semanas. Tres semanas enteras.