Relámpago, esplendor, breve-visiones, textos y pre-textos..., hoguera fulgurante que incluso en la distancia late hacia las esencias de la clara poesía y el creativo universo de este poeta total. Como hizo el gran Picasso, en su famosa serie La metamorfosis de un toro, Morrison ha logrado con poquísimos trazos una obra que, desde el minimalismo y la sucinta concreción ciñe todo el mensaje y la apostura de lo primigenio. Lo simple es lo eterno. No necesita describir una flor, porque la imagen de un solo pétalo, o de un entrevisto pistilo, contiene la summa del concepto, la flor que es, y todas las que son y serán. Del haiku a la minificción, de la reflexión al adagio cargado de humanidad y de sentido, la más alta belleza arde calladamente en este fuego y nos habla directo al corazón y a sus latidos. Acérquense a esta hoguera y la escucharán crepitar.
Hay amores que son de otro mundo… y la luna siempre nos abraza. Dulcinea nos regala una nueva, profunda y fantástica bilogía que inspirará de nuevo a todos sus lectores.
Una maravillosa edición especial que incluye las dos novelas de la serie Luna, Suenas a blues bajo la luna llena y Si la luna nos viera tocaría nuestra canción.
Marilyn Monroe era puro fuego, sexualidad a flor de piel, romances turbulentos, pero también era una mujer frágil, asustada y repleta de inseguridades que buscaba en otros -en el Ex Deportista, en el Dramaturgo o en el Presidente- ese amor que ella misma se negaba. Una artista superdotada cargada de conflictos, temores y pasiones desatadas; una niña que no dejó de huir hacia delante y que llegó a burlar a la propia muerte para convertirse en leyenda.
Prentisstown no es como el resto de ciudades. Desde que sus habitantes se infectaron con el germen pueden escuchar los pensamientos de la gente de su alrededor en un Ruido constante y abrumador. No existe la privacidad. No hay secretos.
Todd Hewitt es el único adolescente en esta ciudad de hombres. Este nunca ha sido su lugar. Jamás ha encajado. Hasta que por casualidad encuentra un sitio en completo en silencio. Algo imposible. Un terrible secreto. Y ahora va a tener que escapar antes de que sea demasiado tarde.
Tres facciones marchan hacia New Prentisstown y hacia una guerra que puede destruir todo cuanto Todd y Viola conocen. Las consecuencias de cada acción, y de cada palabra, son incalculables. ¿Apoyarán a un tirano, o a un terrorista? ¿Es mejor salvar la vida de quien más quieres, o la de miles de extraños? ¿Es posible la redención, o hay que darla por perdida?
Y mientras el Ruido, incesante, descubre todos los pensamientos, la voluntad de unos amenaza con superar el deseo desesperado de otros.
Todd y Viola no tienen posibilidad de escapar. Y si la guerra convierte a los hombres en monstruos, ¿qué terribles decisiones les aguardan?
Una mala racha. Así es como podría llamarse a lo que está viviendo Sookie. Primero, su compañero de trabajo es asesinado y a nadie parece importarle. Luego se encuentra cara a cara con una criatura sobrenatural y casi muere en el ataque. Afortunadamente los vampiros le salvaron la vida, así que cuando le piden que busque a uno de ellos, desaparecido en Dallas, Sookie no lo duda ni un momento: les debe un favor.
Se supone que el trabajo es fácil: debe entrevistar a ciertos humanos involucrados en la desaparición. Solo hay una condición, los vampiros deben prometer comportarse y dejar que los humanos salgan ilesos. Más fácil decirlo que hacerlo. Todo lo que se necesita es un pequeño error para que las cosas se vuelvan mortales...