Él ha crecido en un entorno en el que las tradiciones y unos valores anclados al pasado dictaminan su futuro.
Ella se siente tan perdida que le cuesta recordar quién es.
Cuando una casualidad hace que los pasos de Jun y Daniela se crucen en las calles de Londres, no imaginan que sus vidas se acabarán uniendo.
Porque hay encuentros fugaces que se convierten en comienzos.
Porque hay huellas en la nieve que no se pueden borrar y amores imposibles que, tal vez, y solo tal vez, duren para siempre.
En el año 1984 Londres es una ciudad lúgubre en la que la Policía del Pensamiento controla de forma asfixiante la vida de los ciudadanos. Winston Smith, un peón de ese engranaje perverso, trabaja reescribiendo la historia a fin de adaptarla a lo que el Partido considera la versión oficial de los hechos. Hasta que decide poner en tela de juicio el sistema que los gobierna y somete. A poco de publicar la novela, Orwell escribió: «No creo que la sociedad que he descrito en 1984 necesariamente llegue a ser una realidad, pero sí creo que puede llegar a existir algo parecido». Corría el año 1948, y desde entonces la historia se ha encargado de convertir esa obra -entonces de ciencia ficción- en una advertencia más vigente que nunca.
Kamila Hamilton lo tenía todo bajo control... o eso creía: no entraba en sus planes que los hermanos Di Bianco volviesen de nuevo para poner su mundo al revés.
Thiago fue quien le dio su primer beso.
Taylor el que siempre la protegió.
El regreso de los hermanos hace que la vida aparentemente perfecta de Kami se tambalee. Ella ya no es la niña inocente que conocieron: desde que se fueron, parece que nadie puede acceder realmente a ella... nadie excepto ellos.
¿Podrá resistirse Kami a la simple presencia de Thiago?
¿Qué sucederá cuando Taylor comience a mirarla diferente?
¿Estallará todo en mil pedazos una vez más?