Su protagonista, Christopher Boone, es uno de los más originales que han surgido en el panorama de la narrativa internacional en los últimos años, y está destinado a convertirse en un héroe literario universal de la talla de Oliver Twist y Holden Caulfield. A sus quince años, Christopher conoce las capitales de todos los países del mundo, puede explicar la teoría de la relatividad y recitar los números primos hasta el 7.507, pero le cuesta relacionarse con otros seres humanos. Le gustan las listas, los esquemas y la verdad, pero odia el amarillo, el marrón y el contacto físico. Si bien nunca ha ido solo más allá de la tienda de la esquina, la noche que el perro de una vecina aparece atravesado por un horcón, Christopher decide iniciar la búsqueda del culpable.
Carolina del Sur, 1964. Lily Owens es una joven de catorce años cuya vida ha girado alrededor de un padre que no la cuida y que la responsabiliza de la misteriosa muerte de su madre. Cuando su niñera Rosaleen, una mujer negra, orgullosa y sin miedo, es encarcelada por defender su recién adquirido derecho al voto frente a los racistas, Lily decide que ambas deben ser libres. Escapan a Tiburón, Carolina del Sur, un pueblo que guarda el secreto del pasado de su madre, y en el que serán alojadas por un excéntrico trío de hermanas apicultoras, que introducirán a Lily en el fascinante mundo de las abejas y la miel.
Lisa See, la aclamada autora de El abanico de seda, Dos chicas de Shanghái y Sueños de felicidad (Bruguera, 2012) ha conseguido el reconocimiento mundial por su maestría a la hora de retratar las intrincadas relaciones entre mujeres, siempre marcadas por el hilo invisible del destino. Pero nunca antes había ahondado en la amistad de tres mujeres.
Ahora nos ofrece la fascinante historia de tres chicas de muy distinto origen que, entre 1938 y 1948, luchan juntas por cumplir sus sueños en el club más glamuroso de San Francisco, hasta que el ataque japonés de Pearl Harbor, tan lejos de ellas, pone en peligro sus ambiciones, y hasta sus vidas, cuando una traición inesperada lo cambia todo.