Lily no siempre lo ha tenido fácil, pero ha recorrido un largo camino para llegar donde está ahora. Su vida comienza a cambiar el día que Ryle Kincaid, un extraordinario neurocirujano, se fija en ella. Todo en él parece perfecto, salvo su completa aversión a las relaciones, así que cuando Lily se da cuenta de que ella es la excepción a su regla de «no tener citas», no puede evitar preguntarse por qué ha tomado esa decisión.
A medida que las preguntas sobre su relación la asaltan, también lo hacen los pensamientos sobre Atlas Corrigan, su primer amor y un vínculo con el pasado que dejó atrás. Él era su alma gemela, su protector. Cuando Atlas reaparece repentinamente y Ryle comienza a mostrar su verdadera cara, todo lo que Lily ha construido con él se ve amenazado.
A título privado, Maigret se allega a la localidad de Givet, en la frontera franco-belga, para cumplir el encargo de ayudar a los Peeters, «los Flamencos», una familia de prósperos comerciantes. Todo el pueblo los acusa de haber matado a una muchacha francesa, pero el cadáver no aparece, y las dudas se multiplican.
El famoso comisario enfrentará en esta novela no solo una intriga, sino un drama familiar, en el que deberá sondear los silencios y los secretos de todo un clan para acabar erigiéndose en juez.
uando una carta anónima anuncia que durante la misa del Día de Difuntos se cometerá un crimen en Saint-Fiacre, el pueblo natal de Maigret en Bretaña, el comisario debe regresar a sus orígenes para evitarlo.
Al terminar la misa una feligresa ha muerto, como se había anunciado. Y Maigret, a pesar de haber estado presente y atento, no ha visto absolutamente nada que le permita saber quién o quiénes han cometido el crimen.
Con sus habituales paciencia y perspicacia, el comisario deberá internarse en los secretos de toda una comunidad, un mundo en vías de desaparición donde la pequeña noblesa local pretende dictar la ley sin miramientos ni compasión.