Este libro lo explica a partir del colapso de la izquierda. Aquella que creyó que la caída del ecosistema soviético en 1991 iba a devenir en una democracia liberal planetaria que, con sus más y sus menos, garantizaría un progreso apacible de la humanidad.
Sin embargo, a lo largo de las tres últimas décadas, los poderes realmente existentes han gangrenado la libertad y la democracia. Han empequeñecido el reparto de la riqueza y, para conseguirlo, ha resultado imprescindible la colaboración de amplios sectores de las élites políticas e intelectuales progresistas, que han transformado sus esperanzas frustradas en un profundo resentimiento contra todo lo que las hubo alimentado.
Para esa izquierda, la clase obrera conforma un populacho superado por la modernidad y la tecnología, incapaz de desprenderse de privilegios arcaicos y cuya nostalgia la asimila a la extrema derecha identitaria y racista. Al mismo tiempo, es la izquierda que defiende un Estado de seguridad que supuestamente protege a la población de las amenazas acechantes pero que, por el contrario, no para de reforzar el miedo, el odio y la persecución de chivos expiatorios. En definitiva, la izquierda que ha arrinconado la lucha de clases y que apuesta por un Estado de seguridad, va a amalgamarse con el racismo distinguido de los hombres poderosos y con el racismo vulgar de las clases subalternas alienadas.
Entonces, ante esta contrarrevolución en marcha, ¿qué hacer? Rancière tiene unas cuantas propuestas.
A muchos nos aterra el nuevo auge del fascismo. Solo en Europa, la extrema derecha integra 5 gobiernos y tiene representación parlamentaria destacada en 27 países. Pero esto es apenas la punta del iceberg de un proceso bastante más complejo: el auge del Estado policial global como respuesta a la profunda crisis del sistema capitalista actual.
A medida que el neoliberalismo dispara las desigualdades hasta límites insospechados (los 26 millonarios más importantes del mundo poseen hoy más de la mitad de la riqueza mundial, mientras 2.000 millones de personas viven en situación de pobreza), los individuos se vuelven 'desechables'. Una población excedente que supone una amenaza de rebelión para la clase capitalista.
Descubre el fascinante retrato de uno de los personajes más influyentes de la historia en este cautivador ensayo sobre Julio César. A través de un análisis profundo y minucioso, Francisco Uría, autor de "La pequeña librería de Stefan Zweig" y "A orillas del Rubicón", revela cómo este legendario líder encarnó muchas de las cualidades y atributos que definen al político moderno.
Julio César, un adelantado a su tiempo, dejó una huella indeleble en el escenario político y social de la antigua Roma. Su carisma, dotes para la estrategia, brillantez intelectual y habilidad oratoria lo convirtieron en una figura única. Este libro nos sumerge en su intrigante vida y muestra cómo su búsqueda implacable de poder, su populismo inicial y su genio militar marcaron un antes y un después en la historia política. Asimismo, subraya la enorme trascendencia que en su formación tuvo Hispania (España).
Explorando tanto sus éxitos monumentales como sus controvertidas decisiones, descubriremos cómo Julio César personificó y anticipó las virtudes y los vicios del político moderno. Su ambición desmedida y su capacidad para manipular a las masas son aspectos que siguen resonando en la política actual. La lectura de estas páginas permitirá entender por qué, tantos siglos después, su legado ejerce un marcado influjo en el mundo contemporáneo.
Luhmann enfatiza en el carácter relacional y comunicacional del poder, dirigido por un código que moviliza las relaciones entre las personas.
La teoría clásica considera el poder como un bien apropiable, que uno puede tener como un bien material y, en consecuencia, también perder. La posesión puede, entonces, acumularse y hacerse durar. Sin embargo, este uso metafórico no basta para analizar más profundamente este tema. La tan fácilmente asible categoría de posesión esconde lo que hay que saber justo en el punto donde la pregunta tendría que empezar, pues ¿qué condiciones sistémicas tendrían que cumplirse para que el poder pueda llegar a ser una posesión, para que sea administrado como tal, transferido como una cantidad constante, aumenta-do y disminuido, y defendido contra peligros específicos?
El poder es una manifestación del fenómeno más general de la influencia, es decir, una comunicación que se entiende como selección de las alternativas de A que implica una selección de las alternativas de B. Es una selección selectivamente condicionada.
La función del poder puede ser así reescrita como la generalización de la relevancia de rendimientos decisionales individuales. Para esto se requiere reflexividad, un proceso incremental por medio del cual el poder se aplica a sí mismo y crece en el sistema más allá del poder individual de cada uno. Entonces, ya no es poder que unos ganan y otros pierden, sino que es Poder en el sistema.
El columnismo actual está dominando por dos vicios que parecen contrapuestos: el cinismo y el buenismo (...) Mariona Gúmpert está en la acera opuesta, aupada a hombros del liberalismo clásico, la doctrina social cristiana y el sentido común de quienes sienten alergia por este parque temático del consumismo, cada vez más insatisfactorio para todos. (Del Prólogo de Víctor Lenore).
En Infodemics, posverdad y la sociedad que viene, Mariona Gúmpert, una de las columnistas más brillantes de la actualidad, combina perfectamente la solidez argumentativa con un estilo entretenido e ingenioso para presentarnos a través de estas páginas las contradicciones e incoherencias de nuestra cultura que han llevado al desgaste y decadencia del pensamiento posmoderno.
Sus escritos, de gran rigor intelectual y fuerza expresiva, despiertan al lector de su letargo, haciéndole salir de sus inercias y replantearse la realidad, empujándole a revisar de un modo crítico los argumentos procedentes tanto de la derecha como de la izquierda.
Mariona Gúmpert, Dra. en Filosofía por la Universidad de Navarra, con una tesis sobre libertad y liberalismo filosófico. Articulista en Vozpópuli y en El debate de hoy, ha colaborado en distintas revistas como Letras libres, Disidentia o The Last Journo.
Actualmente compagina su trabajo como escritora con la docencia universitaria en la Universidad Pontifica de Salamanca y en ISSEP. Participa asiduamente en congresos y debates, además de impartir conferencias y realizar una labor activa en redes sociales. Su gran ambición es acercar las ideas al público no especializado en filosofía, lo que consigue con un estilo ameno, cercano y salpicado de humor.
Estamos a las puertas de un cambio de ciclo político que no va a limitarse a un eventual cambio de gobiernos en el año electoral. España, como el resto de países, tendrá que afrontar en 2023 una serie de nuevos desafíos provocados, en gran parte, por unas transformaciones geopolíticas y geoeconómicas que están remodelando el orden mundial.
José María Beneyto y Rafael Pampillón reúnen en este volumen colectivo a una quincena de expertos del mundo de la academia, la política, la empresa y la sociedad civil para hacer un diagnóstico de los principales retos y problemas que permanecen sin resolver en España.
Desde la amenaza a la sostenibilidad del sistema de pensiones en el futuro a una educación estancada en la mediocridad, pasando por el declive demográfico, la lucha contra el cambio climático o el déficit de independencia de nuestro Poder Judicial.
Pero el libro no se limita a ofrecer un análisis teórico de la situación actual, sino que también recoge un amplio catálogo de propuestas regeneracionistas sobre las que edificar una auténtica alternativa al modelo político actual.
La alternativa no se deja en el tintero ninguna de las cuestiones candentes de la actualidad, y ofrece orientación para actuar ante los desafíos del empleo y el talento, la educación y la formación profesional, responder a las necesidades de las empresas en el nuevo ciclo, fortalecer los supervisores económicos independientes, mejorar la eficiencia del gasto público en España, conseguir la cuadratura del círculo fiscal (asumiendo rebajas impositivas y mejorando el Estado del bienestar al mismo tiempo), desarrollar una política turística consecuente, reforzar el papel de la sociedad civil y, en suma, renovar nuestra democracia.