A los diecinueve años, Azad, un joven kurdo iraní, fue reclutado por el Ejército de Irán para luchar contra su propio pueblo. Al negarse a ir a la guerra contra sus compatriotas kurdos, desertó y se fue al Reino Unido, donde se le concedió asilo y aprendió inglés. Más de una década después, tras regresar a Oriente Medio como trabajador social a raíz de la guerra civil siria, Azad tuvo que volver a empuñar un arma. En septiembre de 2014, tras veinticuatro días de entrenamiento intensivo como francotirador, Azad se convirtió en uno de los diecisiete tiradores voluntarios desplegados por el Ejército kurdo cuando el Estado Islámico asedió la ciudad de Kobane en Rojava, su nueva región autónoma. Este libro narra la intrahistoria de cómo lucharon las fuerzas kurdas durante nueve meses en sangrientas batallas callejeras contra el Estado Islámico. Superados ampliamente en número, los kurdos tuvieron que matar a los yihadistas uno a uno. Entrelazando los brutales acontecimientos de la guerra con la reflexión personal y política, Azad Cudi medita sobre el incalculable precio de la victoria: los efectos permanentes de la guerra en el cuerpo y la mente, la devastadora muerte de dos de sus compañeros, la pérdida de cientos de voluntarios que murieron en la batalla. Pero, como explica, fueron sacrificios que salvaron no solo una ciudad, sino a un pueblo y su tierra.
La obra clásica que popularizó el concepto de «storytelling» y que nos alertó de cómo la narrativa fue poco a poco sustituyendo a la verdad en todos los ámbitos de la comunicación, desde la política hasta la publicidad.
Desde sus orígenes, la humanidad ha cultivado el arte de contar historias, una actividad que está en la base de toda relación social. Pero, en las últimas décadas, la industria de la comunicación y el sistema capitalista se han apoderado de ese arte, primero en Estados Unidos y luego en Europa, bajo la denominación de «storytelling». Tras la mayoría de las campañas publicitarias, pero también de buena parte de las electorales, se esconde esta sofisticada técnica de comunicación, control y poder con la que los estrategas del storytelling moldean las necesidades de los consumidores.
Campañas de marketing que se apoyan más en las emociones que en las propiedades de los productos que venden, soldados que se ejercitan con videojuegos concebidos en Hollywood, asesores de comunicación que transforman los acontecimientos políticos en un relato… Del increíble asalto a la imaginación de los humanos que estamos viviendo habla Christian Salmon en este libro, en el que pone al descubierto por primera vez el uso moderno de la narración como arma de manipulación masiva.
Nunca el conocimiento había sido tan importante y a la vez tan sospechoso; nunca lo habíamos necesitado tanto y desconfiado al mismo tiempo de el; nunca habíamos depositado tantas esperanzas en el conocimiento como solución mientras se convertía el mismo en un problema. La ciencia es fuente de la máxima autoridad y siempre controvertida. Los expertos son para unos la tabla de salvación y para otros los destinatarios de todas las iras. Mientras hay quien espera que el conocimiento nos saque del error y la ignorancia, hay tambien quien teme que nos este conduciendo a los peores desatinos. No entenderemos la sociedad en la que vivimos si no damos una explicación adecuada de este extraño antagonismo, que ya no puede ser entendido a partir de la moderna contraposición entre la Ilustración y sus sombras, como un combate moral entre progresistas y reaccionarios, la clásica demarcación entre cuerdos y locos.
Creado en 1944 por el jurista Raphael Lemkin, el término «genocidio» designa un tipo de crimen masivo por el que un grupo es destruido intencionadamente, de forma total o parcial, en nombre de criterios nacionales, étnicos, raciales o religiosos. El siglo XX, que empezó con la aniquilación de la población armenia y terminó con el exterminio de los tutsis en Ruanda y la "limpieza étnica" en la antigua Yugoslavia, dejando entre medias las grandes masacres de la era estaliniana, la tragedia de la Shoa y el exterminio de una parte importante de la población camboyana, bien puede llamarse "el siglo de los genocidios". En el presente libro Bernard Bruneteau analiza en detalle los casos del siglo pasado en que se puede aplicar el término, subrayando lo que considera su principal agente de incubación: el potencial de violencia acumulativa presente en algunas experiencias políticas, militares e ideológicas del siglo, como las matanzas derivadas de las conquistas coloniales, las teorías de la lucha por la vida que las sustentaron o la "guerra total" de 1914, que inauguró el encuentro de los europeos con la muerte en masa.
La bombilla, durante mucho tiempo símbolo del progreso, debe apagarse. Es necesario abrazar la oscuridad para asegurar un futuro brillante. ¿Cuánta luz es demasiada? La flora y la fauna del mundo han evolucionado para operar en el ciclo natural del día y la noche. Sin embargo, la iluminación permanente ha hecho que la contaminación lumínica sea un grave problema. Desde el espacio, nuestro planeta brilla intensamente 24 horas al día, los 7 días de la semana. Al extender nuestras horas de luz, hemos expulsado a los habitantes de la noche e interrumpido los ritmos circadianos necesarios para el sustento de todos los seres vivos. Las farolas y los letreros de neón de nuestras ciudades están alterando ecosistemas enteros. Johan Eklöf nos anima a apreciar la oscuridad natural y sus beneficios únicos con un apasionante relato sobre el efecto dominó del daño que infligimos al mantener las luces encendidas: insectos que no logran reproducirse, aves cegadas y desconcertadas, murciélagos hambrientos mientras esperan en vano a insectos que solo salen en la oscuridad... Y nosotros, los humanos, podemos encontrar que nuestras hormonas, peso y salud mental se ven afectados.
Este libro es un diario público, libre de los tormentos internos con los que las almas atribuladas engañan al tiempo, escrito por quienes miran con cierta voracidad lo que sucede a su alrededor y, mirando, muchas veces no dan crédito a sus ojos. Un monólogo en voz alta, durante el cual el hablante incontinente también habla solo porque habla principalmente a una multitud de transeúntes. El diario público registra y comenta, día tras día, la drástica transformación del modo de producción dominante, el calendario en el que se inscriben acciones y pasiones, formas de vida, estilos de pensamiento, tras la derrota de los movimientos revolucionarios que tuvo lugar en la segunda mitad del siglo pasado.