En las últimas décadas, las transformaciones del capitalismo han resultado espectaculares. La expansión de la financiarización ha otorgado a la renta una nueva centralidad como forma primordial del beneficio. Del mismo modo, cantidades ingentes de inversión se han desplazado de la instalación de industrias y la compra de bienes de equipo a los mercados financieros. Y en paralelo, la digitalización y la consolidación de las nuevas corporaciones tecnológicas han producido formas de concentración económica (y por ende de influencia política) prácticamente inimaginables en épocas pasadas.
Estas transformaciones nos obligan a plantearnos preguntas radicales: ¿se puede seguir entendiendo esta economía, cada vez más orientada a la renta y cada vez más digitalizada, como propiamente capitalista? ¿No estaríamos asistiendo a una mutación de tales magnitudes que deberíamos calificar como un nuevo sistema socio-económico; uno al que quizás podríamos dar el nombre provisional de «tecnofeudalismo»? Alrededor de estas preguntas, los artículos reunidos en este volumen tratan de sentar los términos de uno de los debates más importantes de nuestro tiempo.
Las disputas comerciales suelen entenderse como conflictos entre países con intereses nacionales contrapuestos, pero a menudo son el resultado inesperado de decisiones políticas internas para servir a los intereses de los ricos, a costa de los trabajadores y los jubilados de a pie. Klein y Pettis rastrean los orígenes de las actuales guerras comerciales en las decisiones tomadas por los políticos y los líderes empresariales de China, Europa y Estados Unidos en los últimos treinta años. En todo el mundo, los ricos han prosperado mientras los trabajadores ya no pueden permitirse comprar lo que producen, han perdido sus puestos de trabajo o se han visto obligados a endeudarse más. Desafiando las corrientes dominantes, los autores nos invitan a reflexionar acerca de cómo las guerras de clase de la creciente desigualdad constituyen una amenaza para la economía mundial y para la paz internacional, y lo que podemos hacer al respecto.
A los 26 años, Warren Buffett fundó Buffett Partnership Limited, que existió desde 1956 hasta 1970. Durante este tiempo, escribió 33 cartas a su pequeño pero creciente grupo de socios. Estas cartas son la crónica de sus pensamientos, enfoques y reflexiones en el periodo inmediatamente anterior a su mandato en Berkshire Hathaway, un periodo en el que alcanzó un éxito inversor sin precedentes. Este período inicial fue asombroso: en 1968 batió al Dow en más de un 50%. Buffett quería asegurarse de que sus socios entendían su método, y por ello les escribió estas 33 cartas en las que establecía lo que denominó “las reglas básicas”; para la inversión, reglas que siguen siendo sorprendentemente válidas hoy en día para todo tipo de inversores, tanto principiantes como profesionales más sofisticados.
El libro «Las reglas básicas de Warren Buffett» reúne, por primera vez, y con el permiso de Buffett, Las reglas básicas de Warren Buffett y las enseñanzas que revelan las cartas. Aquí encontrará la base de la estrategia de diversificación de Buffett, su celebración casi religiosa del interés compuesto y sus tácticas para mejorar los resultados del mercado en al menos un 10% anual.
La libertad económica es un requisito esencial para la libertad política. Esta es la tesis central de Libertad para elegir, escrito a cuatro manos por Milton y Rose Friedman. Al permitir a los individuos cooperar voluntariamente, el sistema de libre mercado ejerce de límite al poder coactivo del Estado y actúa como una fuerza dispersora que impide grandes concentraciones de poder económico en unas pocas manos.
La vivienda es todo menos un asunto privado. Como expresión de las condiciones objetivas y como conflicto social permanente goza de centralidad política. En el campo de tensión entre el mercado, el Estado y las prácticas cotidianas, las encrucijadas principales de nuestra sociedad se reflejan en el acceso a la vivienda. En 1872, Friedrich Engels publicó Sobre la cuestión de la vivienda desde una perspectiva de la economía política. El texto subraya la imposibilidad del derecho a la vivienda sin cambios revolucionarios. 150 años después, sorprende la vigencia de sus análisis, que permiten reconocer cuestiones aparentemente específicas del desarrollo urbano como principios estructurales del capitalismo.
Sin embargo, abordar la cuestión de la vivienda en el siglo XXI significa pensar más allá de Engels. Los planteamientos feministas sobre la reproducción de los roles de género, los retos ecológicos, o el alcance de la regulación e intervención estatal en el sector, han añadido nuevos elementos a la cuestión. Ahora bien, ¿dónde queda la revolución, la propuesta engelsiana definitiva, también en el ámbito de la vivienda?
En Lo que Engels no podía saber. La vivienda como bien de inversión Andrej Holm actuliza las hipótesis intermedias de Engles, y plantea distintas posibilidades para la resolución de los problemas de acceso a la vivienda. Lo llama reformismo radical, una vía de propuestas concretas que, conjuntamente, representarían una alternativa cargada de potencia revolucionaria. En algún lugar, entre Engels y Holm, hay unas cuantas respuestas.
Una guía para entender la economía y tomar mejores decisiones
Día tras día nos vemos bombardeados por una ingente cantidad de información procedente de los medios y de las redes sociales. En un mundo cambiante y cada vez más complejo, al ciudadano le resulta muy difícil formarse un cuadro de conjunto de la realidad que vemos en las noticias y que nos presentan los gobiernos y los actores económicos.
Aunque son ya pocos los que se mantienen fieles a la idea de que el periodismo no habría de limitarse a ser una mera correa de transmisión de los poderes públicos y empresariales, sino a rescatar de entre el ruido lo realmente relevante, el analista Jose Antonio Vizner sigue encomendado a esa tarea y lleva años dedicándose a interpretar y presentar los datos económicos de forma que resulten accesibles.
Sirviéndose de esclarecedores gráficos y explicaciones, Lo que esconde la economía repasa temas candentes como las guerras comerciales entre China y Estados Unidos en la segunda Guerra Fría, el papel de Europa en un contexto de crisis energética y transición ecológica o la disrupción de la inteligencia artificial.
Vizner plantea este libro con el propósito de continuar con la tarea originaria del periodismo como cuarto poder: la de desentrañar las verdaderas razones que hay detrás de los acontecimientos económicos y de los grandes desafíos a los que nos enfrentamos en la economía española, europea y mundial, para que así podamos tomar nuestras decisiones económicas contando con toda la información disponible y que el dato no acabe matando al relato, como se suele decir, sino que echemos mano de él para que éste lo respalde.