En el punto álgido de la Segunda Guerra Mundial, cuatro mujeres comenzaron sus estudios en la universidad de Oxford: una católica conversa extremadamente brillante; una chica de buena familia que anhelaba escapar del asfixiante ambiente en el que había sido criada; una ferviente comunista aspirante a novelista con una lista de pretendientes más larga que su brazo, y la cuarta: una tranquila y desordenada amante de tritones y ratones que se convertiría en una gran intelectual pública de su tiempo. Se hicieron amigas de por vida. En ese momento, solo un puñado de mujeres había hecho de la filosofía su modo de vida. Pero cuando la mayoría de los hombres de Oxford fueron reclutados en la guerra, todo cambió.
Mientras Elizabeth Anscombe, Philippa Foot, Mary Midgley e Iris Murdoch trabajaban para hacerse un lugar en un mundo dominado por hombres, mientras construían sus amistades y familias, mientras se acercaban y se alejaban entre ellas, siempre defendieron que algunas maneras de vivir son mejores que otras. Las diferencias en el ámbito de la filosofía moral que marcaron sus aportaciones provocó el cambio más importante en la disciplina durante más de un siglo, reemplazando la árida escolástica por una vuelta a las discusiones sobre la bondad, la virtud y el carácter.
¿Cómo restaurar la verdad y colocarla en el lugar que le corresponde, en el trono de la razón? En estos ensayos, Von Hildebrand desmantela los diversos movimientos intelectuales y políticos que han trabajado para socavar la verdad durante el siglo pasado: relativismo, escepticismo, materialismo, historicismo, psicologismo, comunismo y nazismo.
Muestra la absoluta insuficiencia de sus argumentos y detecta en ellos una raíz común: la negación de Dios y el empeño de algunos en ocupar su lugar. A quien mire el mundo moderno y se pregunte cómo hemos llegado hasta aquí, y cómo salimos, este libro le mostrará el camino.
La raíz y causa principal de la historia de la humanidad tanto en sus aspectos positivos como negativos es el carácter dual y antitético que caracteriza sin excepción al hombre, esto es, su inclinación tanto al bien como al mal. Este dualismo individual es asimismo la clave para explicar y comprender el dualismo colectivo que ha existido siempre y las luchas que han surgido una y otra vez entre las diversas clases y estratos sociales. Partiendo de esta tesis, Heleno Saña reconstruye en su nuevo libro los conflictos de la más diversa especie que se han dado en todos los ciclos históricos, tipos de sociedad y civilizaciones desde los tiempos más remotos a hoy.
Consecuente con su concepción dualista del hombre y de la historia, el autor rechaza como dogmáticas y unilaterales las visiones edificantes de la historia, a la vez que rechaza las concepciones pesimistas que niegan al hombre la capacidad de aprender de sus errores y buscar modos de vida y una tabla de valores capaces de poner en pie un modelo de sociedad lo más humano y justo posible. El camino a seguir para alcanzar esta meta es el de combatir, a través de la reflexión y el examen de conciencia, sus inclinaciones egoístas y potenciar lo que en él anida de noble y altruísta.
El espejo y el oráculo ofrece, en un lenguaje accesible, una visión exhaustiva de la estética de Schopenhauer. La obra sitúa al filósofo en el contexto intelectual de su momento, de modo que pueda comprenderse su singularidad como pensador de la belleza y de lo terrible.
A continuación, el libro se desplaza desde “la filosofía del espejo” al lugar opuesto. Tras dejar atrás la juventud, Schopenhauer desarrolló una “filosofía del oráculo”, de vocación activa, para comerciar con el mundo en las disputas sociales, en la pugna por el prestigio burgués y en la satisfacción de necesidades. Esta segunda sección oracular versa sobre temas como la astucia, la dialéctica, el honor, la vanidad, la vejez o la amistad, que no siempre han sido atendidos por los intérpretes.
De la desesperación más profunda nace también la esperanza más íntima. La esperanza nos lanza hacia lo desconocido, nos pone camino de lo nuevo, de lo que jamás ha existido. Guerras, migraciones masivas, atentados, catástrofes climáticas, crisis y pandemias: escenarios apocalípticos muy diversos nos confrontan con una inminente amenaza de hundimiento y extinción. Y mientras vamos de catástrofe en catástrofe, nuestra verdadera vida se asfixia y se ve reducida a una pura supervivencia. Sin embargo, la esperanza nos abre tiempos futuros y espacios inéditos, en los que entramos soñando. Es toda una manera de existir, que no resulta de hechos dados, sino que posibilita nuevos acontecimientos precisamente cuando más imposibles parecerían. Tras sus famosos ensayos de crítica negativa del régimen neoliberal, en esta nueva y novedosa obra el célebre filósofo Byung-Chul Han emprende no ya un viraje, sino una verdadera superación hacia una alentadora visión del hombre. En el espíritu humano anida la capacidad de hacer fecundo lo más yermo.
El fin de la historia no puede haber llegado con el neoliberalismo, como anunció Fukuyama. El espíritu universal, según Hegel, sigue un proceso dialéctico entre dos polos opuestos cuya tensión culmina en su síntesis. Así como el salmón, que retorna a su lugar de nacimiento para morir y desovar, el espíritu universal, tras su paso por Europa y hacer escala en Silicon Valley, vuelve al origen, que Hegel identifica en China. Aquí encontramos la síntesis entre capitalismo liberal y comunismo. La inteligencia artificial será su nueva herramienta de poder económico-tecnológico, que logrará desbancar al ser humano. Quizás entonces la historia humana llegue a su fin.
Con una riqueza de ideas y el uso de potentes símbolos e imágenes, Moritz Rudolph nos ofrece una filosofía de la historia mediante una narrativa original y provocadora que desborda los límites de las categorías teóricas habituales. El ensayo se presenta como una llave de comprensión de nuestra historia presente y de un posible futuro cada vez más cercano.