¿ES POSIBLE MANIPULAR EL PASADO?
Hispania, años 700-756. En un lugar próximo a Cangas de Onís, los astures que habitaban las montañas se enfrentaron a las tropas de al-Andalus. O, al menos, eso es lo que cuentan las crónicas cristianas... Pero ¿es posible que esta batalla nunca se librara?
José Luis Corral, catedrático de Historia Medieval y uno de los autores más queridos de la novela histórica, disecciona en estas páginas la verdad sobre lo que las fuentes documentales esconden y todo lo que revelan las leyendas cristianas y musulmanas.
Desde la crisis y caída del reino visigodo hasta la creación de al-Andalus y la posterior reconquista de Hispania, pasando por las continuas luchas de poder por el dominio de la Península, este libro es una invitación a revisar con mirada crítica nuestro pasado, el significado de los mitos y la ma nipulación histórico-política, consecuencia de que el relato siempre lo hayan controlado los vencedores.
El descubrimiento de América en 1492 fue un hecho extraordinario que significó el inicio de una nueva etapa histórica: la Edad Moderna. Un nuevo continente se abrió primero a los descubridores, a los que siguieron los denominados «conquistadores». Pequeños grupos de hombres iniciaron una serie de exploraciones y conquistas de carácter épico y recorrieron el continente de norte a sur, proyectando el poder hispano desde California hasta la Patagonia.
Un apasionante volumen que recoge un importante trabajo de investigación y síntesis, en el que la autora, adentrándose en la sociedad y la política de la época, consigue arrojar luz sobre los orígenes y la vida del almirante. Un completo y atractivo recorrido por sus viajes de descubrimiento y conquista.
Al comienzo de la Segunda Guerra Mundial, Jan Zwartendijk, cónsul holandés en Kaunas, Lituania, encontró una forma de salvar la vida de miles de refugiados judíos que habían huido de Polonia: les tramitó visados para viajar a la colonia holandesa de Curazao. De esta manera, miles de personas se embarcaron en el Transiberiano Exprés, atravesaron la Unión Soviética hasta llegar a Vladivostok y, desde allí, continuaron su viaje hacia Japón y posteriormente a China, antes de extenderse por todo el mundo. El 95 % de aquellos refugiados consiguieron sobrevivir a la guerra.
La hazaña de Jan Zwartendijk es tan edificante y heroica como desconocida. Ahora, el renombrado autor Jan Brokken la rescata del olvido y sigue el destino de muchos de los judíos que lograron escapar, en una epopeya inolvidable que ofrece una imagen impactante de una época desesperada.
Con este volumen se pone punto y final a la obra Imperio, Reforma y Modernidad, que pretende ser un relato sobre la formación de la constelación moderna a través de la dura batalla que mantuvo el pensamiento reformado con los poderes concentrados, monárquicos e imperiales de la época. En su primera parte, este volumen ofrece una exposición de la sistematización teológica de la llamada Segunda Reforma, que desde el Regnum Christi de Bucero en Inglaterra se extiende hasta la imponente obra de Juan Calvino, la Institución Cristiana. En la segunda se muestra la eficacia social, religiosa, cultural e histórica de esa sistematización teórica a través de la impugnación de las monarquías de los Austrias, los Valois y los Estuardo y, sobre todo, a través de las formas sociales que pretendía erigir. El subtítulo del libro, La revolución práctica de Calvino, sugiere que la magna obra del reformador no se puede comprender solo desde el análisis teórico de su pensamiento, que está históricamente imbricado de praxis. Imperio, Reforma y Modernidad es una obra imprescindible para comprender la genealogía religiosa y espiritual de los tiempos modernos.
Lo que hoy se conoce como mundo clásico, y que pervive entre nosotros a través de la historia de su recepción, es en realidad el precipitado de dos tradiciones, de dos culturas, en un sentido muy amplio de ambos términos que engloba aspectos tanto intelectuales como institucionales y materiales. El lema horaciano Graecia capta ferum victorem cepit intulit agresti Latio [La Grecia conquistada conquistó al feroz conquistador y trajo las artes al rústico Lacio] recoge solo de modo parcial esta idea: la Grecia conquistada enseñó a Roma sus artes, es cierto, pero fue Roma la que proyectó a Grecia por todo el imperio y hacia la posteridad, y la que hizo suyo el legado heleno para convertirlo en factor de su propia hegemonía imperial e identidad. Este libro se hace cargo de este enriquecedor hibridismo cultural. Especialistas de primer nivel analizan múltiples contextos, desde la política a la economía, desde la cultura a diferentes ámbitos de la sociedad, en los que cobró cuerpo el helenismo bajo hegemonía romana. La obra muestra que los frutos del hibridismo grecorromano trascendieron el mundo mediterráneo y presta particular atención a su decurso entre los siglos ii a.C. y ii d.C.