Un Fernando Savater más libre e iconoclasta que nunca. Carne gobernada es posiblemente su obra más personal donde a través de un viaje por sus vivencias, reflexiona sobre la política actual, el deseo y la sensualidad en la madurez. Además de explicar cómo los acontecimientos recientes han motivado su cambio ideológico y criticar la clara decadencia política y cultura del Occidente, lanza un dardo al periódico en que siempre ha escrito, El País, y un alegato a favor de la libertad sexual de los mayores.
Con un tono narrativo y un lenguaje cercano lleva al lector por una travesía que agitará conciencias y levantará polémicas.
La visión sobre China de una de las grandes figuras de la política internacional en la segunda mitad del siglo XX y Premio Nobel de la Paz.Cualquier intento de comprender el futuro papel de China en el mundo comienza con el reconocimiento de su historia: ningún otro país puede reivindicar una relación tan poderosa con su pasado y sus principios tradicionales, y son muy pocas las sociedades que han alcanzado una dimensión y una sofisticación comparables.Henry Kissinger fue el gran artífice de la apertura de China al mundo con su visita en 1971 como secretario de Estado, y la preparación de la que al año siguiente llevaría a cabo el presidente Nixon. Desde entonces, la relevancia de China en el mundo no ha dejado de crecer. Kissinger ha ayudado a configurar las relaciones de China con Occidente, y ha escrito por fin la historia de un país que conoce íntimamente.En este libro, Kissinger revisa los episodios clave de la política internacional china desde la época clásica hasta nuestros días y examina su estrategia diplomática en momentos tan fundamentales como los primeros encuentros entre el país asiático y las modernas potencias europeas, la creación y el colapso de la alianza chino-soviética, la guerra de Corea, el viaje histórico de Richard Nixon a Pekín y las tres crisis en el estrecho de Taiwán.
Fran Hervías fue de los primeros en llegar a Ciudadanos y de los últimos en irse. Llegó al partido con la ilusión de un joven catalán que sentía aversión al clima nacionalista que crecía en Cataluña por aquel entonces y que entendía ese nuevo partido como la posición que nadie más ejercía. Tras ser el artífice de su expansión y construcción en toda España como secretario de organización, se fue de Ciudadanos tres lustros más tarde, renunciando a su acta en el Senado, con un partido que había estado a punto de llegar a la Moncloa, pero que se desgajaba a marchas forzadas.
Este libro, escrito sin medias tintas desde la posición privilegiada de quien durante mucho tiempo estuvo dirigiendo la sala de máquinas del partido y seleccionando a sus cuadros, da cuenta de la verdadera historia del partido; de sus éxitos y de sus fracasos, de sus peleas internas y de sus facciones, de sus luchas ideológicas y pugnas personales. Un relato apasionante que nos sumerge en los entresijos de la alta política y que permite entender la caída de Ciudadanos, pero también del último proyecto de un partido liberal en España.
La historia del siglo XX ha producido una innumerable cantidad de figuras fascinantes, de biografías volcadas en los procesos revolucionarios y en las trágicas guerras que atravesaron el siglo. Paul Mattick es sin duda una de ellas. Obrero tornero, desde muy joven implicado en la izquierda comunista alemana, víctima de la violenta represión que siguió a la Revolución de 1918 y siempre volcado en una continua actividad de autoformación y discusión. La singularidad de Mattick se cifra en una fidelidad sin mediaciones al principio que impulsó al movimiento obrero desde la Primera Internacional: que la revolución solo puede ser obra de los trabajadores mismos. Por eso, fue un crítico temprano e implacable no solo del reformismo, sino del leninismo bolchevique. A la vez, defendió la posibilidad de otro tipo de comunismo, resultado de las instituciones democráticas de poder obrero, los soviets, los consejos.
Condenado, como tantos otros, a la inactividad política en los años de la Guerra Fría, su esfuerzo se volcó entonces en una tarea que ya había comenzado a desarrollar en la década de 1930: el estudio de la tendencia a la crisis del capitalismo. El análisis de los límites y las contradicciones de la acumulación de capital parecían apuntar, inevitablemente, al colapso del sistema capitalista y con este a la posibilidad de una alternativa revolucionaria. En este sentido, destacan los trabajos teóricos en los que aborda las hipótesis primeras de Marx acerca de la caída de la tasa de ganancia, pero también sobre el New Deal y los límites de la economía mixta (Keynes), además de la discusión acerca de la tesis del capitalismo monopolista de Estado de Baran y Sweezy. Igualmente significativa es su crítica a Marcuse, así como a la conversión del marxismo en una ideología burguesa o el estudio del incipiente ecologismo de los años setenta. Temas, todos ellos, que tienen una abundante representación en los artículos contenidos en este volumen, y que convierten este libro en seguramente la representación más completa de su obra publicada en castellano.
Siguiendo la huella de los canes cervantinos, Cipión y Berganza, y de las perras Fina y Franca de Rosario Ferré, Lina Meruane organiza en este ensayo-ficción su propio coloquio sobre las tensiones que asaltan a los feminismos contemporáneos. Sus perras callejeras –la vieja quiltra chilena #Lina# y la joven chucha española #Luna# –debaten qué implica la liberación de los cuerpos: tener o no crías, exaltar o no la desnudez, aceptar y practicar las transiciones de toda especie, e incluso legitimar el perreo vis a vis una violencia sexual, sicológica y simbólica todavía impune dentro y fuera de los libros.
Este diálogo desenfadado, a ratos un fiero contrapunteo generacional, es, sobre todo, un alegato a favor del examen crítico y de la refutación en vez de la cancelación de los argumentos adversos.